Con el confinamiento por la pandemia de la Covid-19, las llamadas por casos de violencia de género aumentaron en España.
En tan solo dos meses, más de 20 mujeres han muerto en España como consecuencia de la violencia de género, tal como queda constatado en la Delegación de Gobierno contra la Violencia de Género.
Según los datos, las mujeres han fallecido en manos de sus parejas o exparejas, durante este 2021, y más de mil desde el año 2003, en el cual se comenzó a contabilizar el número de feminicidios.
La catedrática de Salud Pública de la Universidad de Alicante y miembro del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), Carmen Vives-Cases, reconoce que “es difícil atribuir los crímenes a una variable concreta”.
Sin embargo, tras los peores meses de pandemia, es posible que España se encuentre al frente de un repunte de asesinatos y violencia de género, tal como apunta Vives-Cases.
“Se ha producido en otros contextos de crisis y emergencias. Hay que tener en cuenta que, si hablamos de feminicidios, para las mujeres que estaban en situación de violencia y de divorcio, el confinamiento fue un elemento de protección”, refiere.
La catedrática también acota que el divorcio, la separación o ruptura de una relación, por parte de la mujer, es uno de los factores de riesgo más frecuentes por lo que un agresor termina cometiendo un feminicidio.
Al respecto, señala que “durante el confinamiento, las mujeres podrían haber estado desarrollando estrategias de mitigación, como intentar evitar una discusión a toda costa o aceptar ciertas conductas».
«En el momento en que dejen de estar confinadas con su agresor y deciden rebelarse, hay un factor de riesgo importante. Es ahí donde no se está trabajando lo suficiente en el sentido de que no se están dando las medidas de protección que se requieren”, añade.
Repunte de violencia de género
Vives-Cases analizó los indicadores durante el segundo trimestre de 2020, en el cual se combinó el confinamiento estricto con las medidas restrictivas, en el primer Estado de alarma.
De acuerdo con su conclusión, durante dicho período se registró la tasa más alta de llamadas al 016, línea que atiende exclusivamente situaciones de posible violencia de género, mientras que las denuncias policiales, los asesinatos y las órdenes de protección disminuyeron.
Una vez que finalizó el primer Estado de alarma, se revirtió la tendencia, es decir, disminuyeron las llamadas al 016 y aumentaron los otros indicadores mencionados.
En el segundo trimestre del año pasado, cuatro mujeres fueron asesinadas; una cifra sorprendentemente baja en los últimos diez años analizados, pero entre abril y junio, las mujeres asesinadas han ascendido a 18.
Además, se analizó el factor del desempleo masculino y se pudo identificar que los aumentos de llamadas al 016 y las peticiones de protecciones se estaban dando en aquellas provincias en las que había una mayor tasa de desempleo masculino.
Por ello, la investigadora afirmó que “la mayor tasa de paro masculino aparece en las agrupaciones provinciales con un mayor incremento tanto de las llamadas como de las órdenes de protección».
«Estos fueron también los únicos clústeres donde hubo víctimas mortales durante la pandemia”, acota.
Es por ello que la catedrática de la Universidad de Alicante recuerda que “falta mucho por analizar y no hay que extraer conclusiones precipitadas, pero sí estamos ante un período muy crítico en el que el aumento de asesinatos machistas, aunque son números estadísticamente pequeños y se mantienen más o menos invariables, sería esperable dado el contexto de crisis socioeconómica que ya está aquí y que se va a recrudecer”.
Las manadas
La lucha contra la violencia de género en España se ha fortalecido tras el aumento de feminicidios y violaciones grupales, como las ocurridas en la última década.
El fenómeno de las denominadas manadas dejó al descubierto más de 100 agresiones sexuales en el período 2017-2019 en varias regiones de España.
Dejó como un hecho que un 25 por ciento de los agresores eran menores de edad, al igual que las víctimas, las cuales representaban un 38 por ciento. Además, un 12 por ciento de las agresiones fueron granadas con teléfono móvil.
Desde el verano del 2016, varios jóvenes fueron detenidos en España debido al abuso contra una joven de 18 años de edad, en el registro de varios casos de violación múltiple.
Otro hecho ocurrido en esa nación fue el caso de la manada de Manresa, en Barcelona, cuando siete jóvenes violaron a una adolescente de 14 años en una fábrica
Tras estos sucesos, la palabra «manada» se asocia en dicho país a las agresiones sexuales cometidas en grupo, ya que «La Manada» era el nombre con que designaban al chat en el que los agresores compartían las imágenes de violación en uno de los casos.
Lo más lamentable es que hay más «manadas» causando estragos.
Entre 2016 y marzo de 2019 fueron perpetradas unas 104 las agresiones múltiples, de los cuales se preportaron: 17 en 2016, 14 en 2017, 59 en 2018 y 14 en los tres primeros meses de 2019; según las autoridades, los responsables de estas violaciones eran casi 360 personas.
Cortesía de Telesur
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