Al menos 140 millones de pesos han sido detectados -hasta ahora- por el Ministerio Público, a través de 53 depósitos en efectivo realizados en cuentas bancarias personales, en la investigación que se adelanta contra el ex director general de la Policía de Investigaciones (PDI), Héctor Espinosa, por los delitos de malversación de caudales públicos, falsificación de instrumentos públicos, y lavado de activos.
La denuncia se generó desde ejecutivos del banco al detectar movimientos extraños de variados y cuantiosos depósitos en efectivo efectuados en las cuentas corrientes de Banco Estado y Banco Chile, del ex director de la PDI y de su cónyuge, María Neira Cabrera -funcionaria del Servicio de Impuestos Internos (SII)-, sin justificación y que no tienen relación con los ingresos acreditados de ambos funcionarios públicos.
En conjunto, el sueldo de Espinosa y Cabrera no alcanzaba los $9 millones, pero los depósitos –realizados por el subcomisario de la PDI, Eduardo Villablanca, asistente clave de Espinosa- correspondían a montos de hasta $20 millones.
«En diversas oportunidades, a solicitud del señor Espinosa, que en realidad yo consideraba una orden, me correspondió hacer depósitos en efectivo en su cuenta del Banco Estado y en el Banco Chile, en el caso de su cónyuge», sostuvo el subcomisario, según consignó La Tercera.
Señaló que realizó un total 38 depósitos, los que por lo general ascendían a $5 millones en efectivo que le entregaba su superior, los cuales se distribuían entre las cuentas corrientes de Espinosa y su esposa en BancoEstado y Banco de Chile.
“Estos dineros eran en efectivo, él ingresaba a mi oficina, que está muy cerca de su oficina, que tenía una conexión interna con la mía, para contextualizar, transitaba por su misma dependencia, y llegaba a la mía. Él llegaba con los dineros en efectivo en la mano, y me los pasaba con las instrucciones de cuánto debía depositar en cada cuenta”, declaró Villablanca, interrogado por el Ministerio Público y un equipo especial del OS-7 de Carabineros, el pasado 11 de junio.
La investigación, a cargo del fiscal de Magallanes, Eugenio Campos -el mismo que indagó el mega fraude en Carabineros-, identificó depósitos en efectivo por $20 millones realizados el 28 de julio de 2016. Días antes, Espinosa había recibido $30 millones en efectivo por concepto de gastos reservados, según consta en documento, por lo que al menos el 66,6% de dichos fondos los destinó a su propio beneficio.
Al respecto, el subcomisario Eduardo Villablanca confirmó que en esa fecha Espinosa le entregó $20 millones, «instruyéndome depositarlos en su cuenta corriente del Banco Chile.
Según antecedentes de la Fiscalía, días antes de ese depósito, el entonces director de la PDI había recibido $30 millones por la vía de gastos reservados.
El Consejo de Defensa de Estado (CDE) oficializó una querella criminal para determinar las eventuales responsabilidades relacionadas con la “sustracción de los fondos reservados manejados por el ex director, como asimismo las falsificaciones documentales verificadas al rendir cuenta de los mismos”, por ende, la Fiscalía pidió al tribunal una audiencia para formalizar a Espinosa, junto a su esposa y el ex ayudante.
También investigan la compra realizada por la esposa de Espinosa de un departamento, una bodega y dos estacionamientos en Las Condes el año 2018, pues sospechan que se habrían usado recursos de los fondos reservados.
Sospechas de ejecutivos bancarios
Entre julio de 2016 y noviembre de 2017, varios funcionarios del Banco de Chile se reunieron en la sede de la Dirección General de la PDI con el entonces director, por algunas observaciones en las que este habría “justificado” el origen del dinero haciendo llegar solamente una declaración de impuestos y alegando que era proveniente de ingresos propios de la PDI, que trabajaba como consejero en la Mutualidad de Carabineros y de viáticos que le entregaban por viajes.
Entre los ejecutivos bancarios que testificaron ante el fiscal Campos, se encuentran: Magaly Leiva, gerente de la Zona Metro de la del Banco de Chile; Carlos Perales, gerente de la banca preferente de la Oficina Central; Rodrigo Avendaño, jefe del área de análisis de la gerencia de prevención de lavado de activos; y Héctor Echaiz, gerente de Cumplimiento, quienes coinciden que lo disruptivo fue la actitud “reacia” de Espinosa, que los depósitos fueran en efectivo y la cantidad de los mismos.
Piden más antecedentes a Fiscalía
Previo a resolver la eventual fecha de formalización de Héctor Espinosa, el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago pidió más antecedentes a la Fiscalía Regional de Magallanes tras imputarle delitos de malversación de caudales públicos y lavado de activos al exdirector general de la PDI.
Sin embargo, fuentes citadas por Radio Bío Bío confirmaron que le piden al Ministerio Público que complete la formalización, es decir, que diga el delito, la participación o datos más específicos.