Magallanes: Comenzó construcción de la primera planta de hidrógeno verde en Chile

Se trata de un proyecto de la empresa Highly Innovative Fuels (HIF), que es el más grande de su tipo en América Latina y uno de los primeros a nivel mundial.

Magallanes: Comenzó construcción de la primera planta de hidrógeno verde en Chile

Autor: Absalón Opazo

Con un recorrido virtual, comenzaron oficialmente las obras de «Haru Oni», la primera planta de hidrógeno verde en Chile. Se trata de un proyecto de la empresa Highly Innovative Fuels (HIF), que es el más grande de su tipo en América Latina y uno de los primeros a nivel mundial.

De acuerdo a la información entregada, la iniciativa contempla una inversión de 51 millones de dólares para la utilización de energías renovables y dióxido de carbono extraído de la atmósfera, proyectando hacia fines de 2022 la producción de 350 toneladas de metanol y 130.000 litros de eCombustible al año.

El hidrógeno verde (H2V) se produce a partir de fuentes renovables como la energía solar, la eólica, la geotermia, entre otras, y se ha convertido en una de las alternativas energéticas que ha sido presentada como sustentable, tendiente a lograr una mayor reducción de emisiones de gases de efecto invernadero ante el cambio climático, con respecto a los compromisos del Acuerdo de París.

Sin embargo, en el caso chileno, diversas organizaciones socio ambientales han señalado que este tipo de proyectos se establecen bajo criterios centralistas, neoliberales y arbitrarios, sin considerar características territoriales, los que están relacionados estrechamente a especulaciones, a la expansión de industrias extractivas e intenciones de nuevas exportaciones.

Por ejemplo, la agrupación Chiloé Libre de Saqueo Energético difundió un video explicativo con respecto a las implicancias del llamado hidrógeno verde, preguntando si realmente es una alternativa ecológica o sustentable. Para la organización, este nuevo combustible presenta una mejora en la descontaminación atmosférica, pero la lógica empresarial con que se desarrolla su avance produce grandes trastornos en los territorios donde se instala, produce y consume.

En términos locales, señalan: “En Chiloé desde hace algunos años vemos como cada vez toma más fuerza la instalación de mega generadores eléctricos, lo que ha puesto en alerta a las comunidades y organizaciones de defensa ambiental debido a su impacto en los humedales y turberas, muy importantes en el ciclo de agua insular. Lo que se suma a desechos, basuras y residuos industriales que se dejan en el lugar”.

Mira el video a continuación:

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