Luego de la publicación de los 330 mil casos de abusos o violencia sexual por parte del clero francés, el papa Francisco manifestó abiertamente su vergüenza por la «larga incapacidad de la Iglesia» para gestionar los casos de curas pederastas.
Durante la audiencia general de este miércoles., el líder religioso expresó su tristeza, dolor y vergüenza tras la publicación de un informe sobre los abusos sexuales contra niños en el seno de la Iglesia francesa durante décadas.
“Deseo expresar a las víctimas mi tristeza y mi dolor por los traumas sufridos y también mi vergüenza, nuestra vergüenza, por la incapacidad de la Iglesia durante mucho tiempo para ponerlos en el centro de sus preocupaciones”, precisó.
El jefe de Estado manifestó «este es un momento de vergüenza. Animo a los obispos, a los superiores religiosos y también a vosotros, queridos hermanos, que habéis venido aquí a compartir este momento, a hacer todo lo posible para que no se repitan tragedias similares», añadía el papa.
En ese sentido, el papa manifestó ‘cercanía y apoyo paternal a los sacerdotes de Francia de cara a esta prueba, que es dura pero sana’, e invitó a los católicos franceses a asumir sus responsabilidades para que la iglesia sea un hogar seguro para todos.
La Comisión Independiente sobre el Abuso Sexual en la Iglesia (CIASE) reveló en un informe que fueron 216. 000 las víctimas de sacerdotes y religiosos de la Iglesia católica en Francia desde 1950.
Los 216 000 menores de edad sufrieron abuso sexual por parte de los curas en Francia en el periodo de 1950 – 2020, sin embargo, esta cifra puede elevarse a 330 000 si se suman los abusos en colegios o instituciones católicas.
Según el informe, Francia no es un caso excepcional; al menos 3.677 menores sufrieron el abuso de los religiosos en Alemania entre 1946 y 2014 y en EE.UU. se registraron 11.000 denuncias.
Cortesía de Telesur
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