Los suministros de uranio regenerado desde Francia permitirán usarlo en adelante en el sector de energía nuclear de Rusia y reducir la carga ecológica sobre la industria atómica, comunicaron en la corporación de energía nuclear Rosatom.
«La reincorporación del uranio regenerado al ciclo de combustible permite ahorrar la reserva estratégica del uranio natural y reducir la carga ecológica sobre la industria atómica en general», comentaron en Rosatom.
El 5 de octubre , los activistas de la organización ecologista Greenpeace celebraron un acto frente a la oficina de la compañía francesa Orano, protestando contra el suministro de uranio regenerado a Rusia. Los activistas denunciaron el «tráfico radiactivo inadmisible» y exigieron al Gobierno francés impedir que el sector nuclear francés «contamine» el territorio de otros países.
«El contrato con Orano contempla el suministro de uranio regenerado a Rusia, que lo utilizará para las necesidades de su industria nuclear. En particular, ese uranio servirá de materia prima en las plantas de la empresa de combustibles nucleares TVEL (parte de Rosatom)», explicaron en Rosatom.
El uranio regenerado es el uranio reducido durante el procesamiento del combustible nuclear usado. El programa de uso del uranio regenerado responde a los objetivos del desarrollo sostenible porque aumenta la profundidad del procesamiento de los recursos naturales no renovables, agregaron en la corporación rusa de energía nuclear.
Cortesía de Sputnik
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