Candidata a diputada, Josefa Faúndez (DA!), denuncia daño ambiental y a la memoria efectuado por Consorcio Santa Marta

El Estero El Gato, ubicado en la provincia de Talagante, se ha convertido en un vertedero. Así lo denuncian los vecinos de Isla de Maipo que han podido presenciar los residuos líquidos generados por el consorcio Santa Marta, que contamina las aguas del estero.

«Las problemáticas que genera el consorcio Santa Marta no son solo a nivel medioambiental, sino también a nivel de derechos humanos», señala la candidata a diputada.

El monumento nacional Hornos de Lonquen, es un sitio de memoria histórico en Isla de Maipo en la provincia de Talagante, testigo de una de las épocas más oscuras y violentas de la historia de Chile: la dictadura cívico-militar. Este lugar se encuentra actualmente bloqueado por un portón del Consorcio Santa Marta, decisión unilateral de la empresa, que no tomó en cuenta la opinión de los y las vecinas.

«Aquí perdieron la vida 15 vecinos de Isla de Maipo, 15 familias que quedaron sin sus padres, sin sus hermanos. No debería existir este portón, debería estar vivo este lugar«, señala el presidente de la Junta de Vecinos N° 7 de uno de los sectores de Lonquen, Hernán Salinas.

La prohibición del acceso a este sitio de memoria para los vecinos de la comunidad es un acto que consideran insólito. Más aún cuando el lugar posee un reconocimiento como patrimonio histórico a nivel nacional.

Josefa Faúndez, quien también es integrante de la red Feministas en Acción de la Provincia de Talagante, señala que le ha tocado tratar con la prohibición del paso a este lugar de memoria en distintas ocasiones.

«Por ejemplo, cuando tenemos que generar escuelitas de verano con nuestros niños y niñas, y hacemos el trabajo de reconocimiento de identidad, llegamos a este espacio y tenemos que pedir que nos abran el portón a través de una solicitud al consorcio, con al menos un mes o dos de anticipación, si no no hay caso.» problematiza la candidata.

Faúndez señala que la privación de estos espacios resulta en graves daños a la identidad y la memoria de las comunidades, oponiéndose y denunciando con fuerza estos actos. «Esto afecta a nuestras memorias, a las memorias con las que luchamos en nuestros territorios, y que hoy pareciera nos están prohibiendo» finaliza la candidata a diputada del distrito 14.