El foro político y académico de la izquierda latinoamericana Grupo de Puebla volvió a reclamar que se suspendan las patentes de las vacunas contra el COVID-19.
«Recordamos que, con los ritmos de vacunación, los estados requerirán de 57 años para alcanzar la inmunización, por eso apoyamos la suspensión de las patentes farmacéuticas para que las vacunas constituyan un bien público de la humanidad», dice la declaración final de la cumbre del Grupo de Puebla que se realizó en Ciudad de México.
El debate sobre la suspensión de las patentes aumentó en el mundo en los últimos meses debido a la pandemia del COVID-19 y a la necesidad de fabricar más vacunas.
Países como Perú, Bolivia y Nicaragua han solicitado la liberación de patentes en América Latina.
«Es imperioso hacer un modelo que enfrente al calentamiento global y que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) recupere al medio ambiente y a la salud como un bien público mundial. Este proyecto deberá servir de referencia para las propuestas progresistas para nuestras naciones», también afirmó el Grupo en la declaración final.
El foro afirmó que se siente «comprometido» con lo establecido en la conferencia de cambio climático COP 26 para el fin de la deforestación y bajar los gases de efecto invernadero.
Por otro lado, expresaron que su modelo busca superar la desigualdad social con perspectiva de género. «La desigualdad en el mundo tiene algunas características respecto al impacto diferencial con respecto a las mujeres. Sabemos que la pobreza tiene cara de mujer. Sabemos que parte de esas desigualdades se basan en una injusta organización social del cuidado que recae en las mujeres», reflexionó la ministra de las Mujeres de Argetina, Elizabeth Gómez Alcorta, durante una conferencia de prensa.
Asimismo, el Grupo de Puebla advirtió sobre un tipo de golpe contra las democracias, que se realiza con el apoyo de los medios de comunicación.
«Denunciamos la persecución judicial y mediática que sufren los líderes y liderazas de Iberoamérica. Argentina, Colombia, Chile, España y Ecuador son solo la punta del iceberg de una estrategia global contra el progresismo que debemos estudiar y comprender por el que tenemos que aprender a luchar», expresó.
Fuente: Agencia Sputnik.