Descarnado es el concepto que define el relato y análisis hecho por Pía Montalva, tras someter bajo la lupa la relación de la violencia política de Estado durante la dictadura militar en Chile (1973-1990) con la vestimenta, la indumentaria que acompañó y marcó la vida de los cuerpos miles de hombres y mujeres.
Un relato que da cuenta del cómo las secuelas de la violencia permanece en el tiempo más allá que las huellas físicas hayan desparecido. Una serie de objetos de manufactura humana que se vuelven contra la libertad humana, cegándolos, atándolos, sólo por el hecho de pensar distinto.
Entendiendo que la indumentaria articula la pertenecía del cuerpo a un espacio y tiempo específico determinado, Pía nos sumerge entre vendas, capuchas, y elementos que los torturadores fueron sofisticando con el paso de los días para provocar en sus víctimas el terror.
Comenzaron usando cinta adhesiva para privar de la visión a los detenidos, usaron vendas elásticas, rasgaron camisas y vestiduras de hombres y mujeres, para privarlos de visión creando traumas mediante el uso de “tejidos blandos” que siendo los primeros en desaparecer del cuerpo cadáver, hoy asoman en el tiempo en un riguroso estudio de Montalva.
El texto que va analizando la sofisticación de la indumentaria represiva evidencia que no es causal cada uso dado, y que cada retazo se convierte en una importante llave de la memoria que Tejidos Blandos reconstruye para el lector(a).
El libro de 458 páginas pronto a ser lanzado, ha sido editado por el Fondo de Cultura Económica y está disponible en las mejores librerías del país desde el mes de septiembre.
El Ciudadano