Existe un vacío legal en la regulación de los taxis piratas en el estado de Puebla; sin embargo, también responden a una necesidad ciudadana de movilidad, señaló la presidenta de la Comisión de Transportes y Movilidad en el Congreso del Estado, María Isabel Merlo Talavera.
En entrevista, llamó a los ciudadanos a coadyuvar en la regulación de esta situación, intentando, en la medida de lo posible, hacer uso únicamente de las rutas legalmente establecidas.
Hace unas semanas, el gobernador del estado Miguel Barbosa Huerta, señaló que en todo el estado se mantienen tareas de revisión y regulación del transporte público, para detectar y cancelar concesiones irregulares así como taxis piratas.
La diputada priista recordó que en caso de un accidente, las personas que usen unidades piratas para realizar sus traslados no podrán hacer válido el seguro que cubre daños a terceros, que establece la Ley de Movilidad y Transporte del estado para el servicio público de transporte.
“De fondo yo diría que protejamos nuestra vida utilizando las unidades de transporte legalmente autorizadas”
María Isabel Merlo Talavera
Presidenta de la Comisión de Transportes y Movilidad en el Congreso del Estado
Autorregulación en el transporte
A pesar de los esfuerzos del gobierno del estado de Puebla para reducir los contagios de covid-19 en áreas públicas, como el transporte público, la diputada María Isabel Merlo Talavera exhortó a los ciudadanos a reforzar las medidas de autocuidado.
“En gran medida la responsabilidad es del ser humano, porque todos somos vulnerables a un contagio, más en esta cuarta ola de la pandemia. Si nosotros vemos que viene saturada una unidad no debemos abordarla, también podemos denunciar el caso”
Señaló que el tomar acciones como estas podrían derivar en llegar tarde a las actividades diarias, pero afirmó que ante este contexto de pandemia, no hay nada más importante que el cuidado de la salud.
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Añadió que para reducir los posibles contagios en el transporte, y en las zonas públicas que tienden a presentar concentraciones de personas importantes, gobierno y ciudadanía tienen que trabajar en corresponsabilidad, para garantizar el cumplimiento de los protocolos sanitarios.