Un equipo de investigadores publicó recientemente en la revista Environmental Research un estudio en el que afirman haber detectado nanoplásticos en las regiones polares por primera vez, lo que significa que este tipo de contaminación ya está presente en todo el mundo.
Los nanoplásticos son partículas que miden de 1 a 1.000 nanómetros, producidas involuntariamente a partir de la fabricación y la degradación de los objetos de plástico. No deben confundirse con los microplásticos, que presentan un tamaño mucho mayor y son menos tóxicos.
El equipo encontró 13 nanogramos de nanoplásticos por mililitro de hielo derretido en Groenlandia, y cuatro veces más en el hielo de la Antártida.
La mitad de los nanoplásticos de Groenlandia eran polietileno, que se utiliza en bolsas y envases desechables. Una cuarta parte eran partículas de neumáticos y una quinta parte era tereftalato de polietileno, que se usa para fabricar botellas y ropa.
En el hielo antártico, la mitad de los nanoplásticos también eran polietileno, pero el siguiente más común fue el polipropileno. Este se utiliza en los contenedores de alimentos y tuberías.
El núcleo de hielo de Groenlandia tenía 14 metros de profundidad, lo que representa capas de nieve que datan de 1965.
«La sorpresa para mí no fue que detectamos nanoplásticos allí, sino que los detectamos en todo el núcleo«, dijo Dusan Materic, investigador de la Universidad de Utrecht (Países Bajos) y autor principal del estudio. «Entonces, aunque los nanoplásticos se consideran un nuevo contaminante, en realidad han estado allí durante décadas».
Materic cree que las partículas de nanoplástico, al ser extremadamente ligeras, son arrastradas a Groenlandia por los vientos de las ciudades de América del Norte y Asia. Por otro lado, es probable que los nanoplásticos encontrados en la Antártida hayan sido transportados hasta allí por las corrientes oceánicas.
Los nanoplásticos y microplásticos han sido encontrados en todos los rincones del mundo, desde el fondo de los océanos hasta la cima de las montañas, y suponen una amenaza para el correcto funcionamiento y la salud de los ecosistemas.
«Los nanoplásticos han mostrado varios efectos adversos en los organismos. La exposición humana a los nanoplásticos puede provocar citotoxicidad e inflamación», escribieron los autores del estudio.
Materic agregó que aún se encuentran en «una etapa muy temprana» de la investigación para sacar conclusiones, pero parece que en todos los lugares que han analizado, este «es un problema muy grande«. ¿Cuán grande, exactamente? El equipo aún no lo sabe.
Fuente: RT.