Cerca de 1.500 colombianos se desplazaron en el departamento colombiano de Arauca (noreste), fronterizo con Venezuela, tras la oleada de violencia que se vive por la presencia de grupos armados ilegales que se disputan el territorio, informó la estatal Defensoría del Pueblo (ombudsman).
«Hemos registrado un total de 1.486 personas de 455 familias afectadas. Las comunidades de Arauca no pueden seguir siendo afectadas por la violencia entre los grupos armados ilegales», dijo en declaraciones publicadas en Twitter, el defensor del Pueblo, Carlos Camargo.
Igualmente, la entidad encargada de velar por los derechos humanos en Colombia se refirió a denuncias de la comunidad publicadas en medios locales, según las cuales, cuatro personas habían sido secuestradas en el municipio de Tame, Arauca, el pasado sábado, refirió una nota de Sputnik.
«Hemos recibido confirmación que las 4 personas que habían sido llevadas contra su voluntad por grupos armados ilegales en Botalón y Puente Tabla, zonas rurales de Tame, hoy regresaron con sus familias», escribió la Defensoría en Twitter.
El jueves pasado, una bomba explotó en el municipio de Saravena, en ese departamento, y dejó un muerto y cinco heridos. A comienzos de enero, enfrentamientos entre las disidencias de la guerrilla Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), dejaron 33 personas fallecidas,