Caracas. – Con la reactivación de 260 celdas para la producción de aluminio, el ministro del Poder Popular de Industrias y Producción Nacional, José Biomorgi, planea en este 2022 una buena parte de la recuperación de las empresas especializadas en Guayana.
Son 800 las celdas que existen en el país, la mayoría de las cuales se encuentran inactivas, y el costo de reinicio de cada una está por el orden de un millón de dólares. Además del alto consumo de energía que requiere cada una para mantenerse operativa, por lo tanto, no se habla de una tarea sencilla; sin embargo, es necesaria para el desarrollo económico que requiere el país.
Durante una entrevista radial, Biomorgi informó que las empresas básicas se plantean la meta de reactivar 260 celdas en el año en curso.
Cabe destacar que las celdas de aluminio y las de hierro no pueden apagarse y por tanto deben permanecer encendidas de forma continua porque sus ánodos a base de bauxita exigen un uso ininterrumpido.
Durante su intervención en el programa, el titular de la cartera hizo hincapié en las graves amenazas y acciones desestabilizadoras a las que se viene enfrentando el Gobierno venezolano, las cuales buscan detener la producción nacional para afectar directamente a los sectores de las empresas básicas y a las empresas que proporcionan la materia prima para la generación de productos terminados.
En este orden de ideas, calificó como un “renacimiento” el proceso de innovación y búsqueda de alternativas para continuar los trabajos, dejando atrás el esquema de dependencia al que estaban sujetas las empresas básicas con respecto a productos, maquinarias, y repuestos. “Con nuestras propias capacidades, comenzamos a sustituir insumos como el yeso, refractarios; comenzamos a utilizar plástico reciclado que, haciendo pruebas de ensayo y error, nos permite ir desarrollando tecnología nacional”, aseveró.
“Hemos producido alrededor de 2 millones de toneladas de productos terminados en las industrias básicas y en el año 2021 rompimos el récord de producción de grilletes gracias al compromiso de la clase trabajadora”, observó.
Puntualizó además que se han recuperado más de 150 celdas de producción de aluminio (sector que, aseguró, fue el más afectado por el saboteo eléctrico del 2019) y que la meta de 2022 es recuperar de manera progresiva 260 celdas para abastecer las necesidades del mercado interno.
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