Una plataforma de hielo de más de 1.200 kilómetros cuadrados se derrumbó en el glaciar Conger, al este de la Antártica, desintegrándose en miles de icebergs que navegan a la deriva a más de 60 kilómetros por hora en dirección oeste-noroeste, informó este miércoles 30 de marzo el Centro Nacional del Hielo de EE.UU. (USNIC), con datos de la NASA.
La ruptura, detectada por primeramente por la Oficina Australiana de Meteorología y confirmada luego por la USNIC, coincide con los últimos datos que revelan que la extensión diaria de hielo marino en la Antártica mostró su nivel más bajo desde que hay registros para el mes de febrero, por debajo de los 2 millones de kilómetros cuadrados.
Asimismo, el Centro Nacional de Investigación Científica de Francia y la Universiad Côte d’Azur señalaron días atrás que se había alcanzado y pasado un nuevo récord de calor en la estación Concordia, ubicada a más de 3.200 metros de altitud en el este del continente, con un registro de -11,8ºC el 18 de marzo.
Según las mismas fuentes de investigación de Francia, «se trata de una temperatura extrema, que supera en más de 40 grados lo normal para esta época del año, en esa zona».
En esa línea, el biólogo e investigador Ignacio Oficialdegui, que ha cruzado 3 veces el continente blanco, dijo a la agencia EFE que el desprendimiento de esta plataforma de hielo ha podido verse afectado por las temperaturas altas e inusuales de los últimos meses, aunque, ha recalcado, «no es la única ni la principal causa», es un fenómeno natural y hay que ahondar más en la investigación.
Oficialdegui detalló que se trata de una placa de hielo flotante -unida al continente a través del borde de un glaciar- y que al romperse se queda en el mar desestabilizándose por la marea y el viento hasta colapsar en miles de pedazos que flotan a la deriva, por la zona de costa e incluso alcanzando el mar abierto.
Un punto que llamó la atención del investigador fue el lugar donde se desplomó la plataforma: la parte oriental, que no es lo más habitual pues «es la zona más fría y donde el continente antártico tiene más volumen y potencia de hielo». Precisamente, desde el Centro de Hielo de EE.UU. explicaron que dicha plataforma, que se nutría de los glaciares Conger y Glenzer, parecía estar totalmente intacta a principios de marzo, por lo que el derrumbamiento habría ocurrido en unas pocas semanas.
Vía Agencia EFE