Fotografía. Monse Arratia
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Desde el Movimiento social en defensa del río Ñuble, Ñuble libre, se señaló: “Se levanta esta acción de movilización social, para demostrar con fuerza y convicción al nuevo gobierno que no queremos represas en el río Ñuble, ni en ningún otro río”.
Indicaron: “Que es impresentable que el estado siga gastando millones de dólares en un proyecto totalmente viciado financiando además a empresas transnacionales y a la clase acomodada de la región de Ñuble (…) Este proyecto no tiene ninguna garantía de ser viable, ni la opción para combatir realmente la sequía que afecta a todo el territorio, sólo a quienes poseen derechos de agua y pretenden aumentar su agronegocio”.
El movimiento también señaló: “Como organización en defensa del río Ñuble, queremos dejar en manifiesto, que el Embalse Punilla es un proyecto extractivista, el cual utiliza a la sequía y con ello la necesidad de asegurar el regadío, demandado por importantes capitales “agro” de la provincia, para ser mandatado por el propio estado chileno a través de su Ministerio de obras públicas, y finalmente poder llevar a cabo un proyecto de generación eléctrica, a través del derecho expropiatorio que sólo posee el estado, provocando el despojo de generaciones de familias habitantes de la cordillera de Ñuble, familias pertenecientes a una condición socioeconómica vulnerable, y que son parte de la cultura arriera, declarada patrimonio cultural del país”.
Finalmente, el Movimiento social en defensa del río Ñuble, Ñuble libre, indicó: “ Bajo esta estrategia se levanta este proyecto, el cual no cumple con la principal obligación establecida en la ley de expropiaciones del estado; que es asegurar que las personas relocalizadas queden en igual o mejores condiciones”.