El informático e investigador histórico, creador de Historias de Huechuraba, Juan Carlos Arellano Yévenes, informaba en redes sociales este 14 de abril: “Trabajar por años investigando y proponiendo tesis sobre asentamientos precolombinos en huechuraba y sobre todo por la red de acequias. Hoy tiene un resultado tangible. Arqueólogos encargados de proyectos de prospección en el sector el Guanaco, se contactan conmigo, para señalar que mi hipótesis ha sido comprobada, pues encuentran evidencia física de red de acequias y cerámica precolombina”.
Agregó el investigador: “Además ser invitado a visitar estos hallazgos. Siento una gran satisfacción y un premio al trabajo de estos años, donde incluso tuve que recibir ataques y ser catalogado de loco por autoridades locales. Solo puedo decir, misión cumplida y gracias a todos los que me acompañaron estos años”.
El autor del libro “Historias Perdidas de la zona norte de Santiago”, ha realizado varias publicaciones, entre ellas y relacionada con los hallazgos mencionados: “La importancia de las acequias precolombinas Huechuraba y Quilicura”.
Compartimos a continuación, parte de su trabajo de “Historias de Huechuraba”
La importancia de las acequias de Huechuraba y Quilicura, dos acequias precolombinas que nacían del salto que está en el portezuelo, y que desde el año 1818 le llamamos La Pirámide,. Nótese que este salto formaba una gran Laguna, que hoy conocemos desde el año 1997 como ciudad empresarial, de ahí corrían y corren todavía en estas acequias, recorriendo todo lo ancho de la actual comuna de Huechuraba hasta llegar a Quilicura. Los planos y croquis que se adjuntan, muestran el recorrido original, a esto hay que sumar que estas acequias madres, alimentaban otros canales interiores como las cruces como se le llamó en la colonia, luego en la independencia fue conocida como la Pólvora y en la actualidad Los Choros por Huechuraba y las Cruces por Quilicura, estos canales en el momento del periodo colonial, en especial en el siglo 18, sumergieron bajo el agua a rinconada el salto y gran parte de Quilicura, dejando tesoros precolombinos sumergidos bajo el agua y luego bajo lodo y tierra. Solo en los últimos 30 años se han desenterrado cementerios y restos precolombinos en estos lugares, todo en medida que se han levantado viviendas y empresas en este sector.
Fuentes:
Rubén Stehberg 2021, Mapocho Incaico Central. Santiago, Museo Nacional de Historia natural.
Juan Carlos Arellano Yevenes 2020, Historias perdidas de la zona norte de Santiago. Valparaiso Ediciones Caronte.
Huerta García, T. 1862: Relacion de la inundacion que hizo el rio Mapocho de la ciudad de Santiago de Chile en el Monasterio de Carmelitas, titular de San Rafael, el dia 16 de julio de 1783. Santiago (Chile), Imprenta del Ferrocarril.
Dr. T Mostardi-Fioretti y Pedro L de La Cuadra, 1863 por la facultad de matemáticas de La U de Chile, publicación se llama Hidrografía. desecación de las Vegas en Chile.