La liberación del diplomático venezolano Alex Saab es un aspecto clave para el avance del diálogo entre el Gobierno y la oposición de Venezuela, dijo en entrevista con la Agencia Sputnik el analista internacional Vladimir Adrianza del Instituto de Altos Estudios de la Defensa Nacional de Caracas.
«Si no se da la liberación de Alex Saab, no prosperará el diálogo. Los factores que apoyan a [exdiputado Juan] Guaidó y a [opositor prófugo Leopoldo] López son simplemente agentes de los Estados Unidos y el Alto Ejecutivo nacional lo sabe y lo ha reiterado ante los medios en varias oportunidades», agregó Adrianza con relación al diálogo.
Saab, quien además de diplomático es un empresario colombiano, está preso en Estados Unidos desde octubre, luego de que fue extraditado de Cabo Verde, donde estuvo más de un año detenido por pedido de la justicia de la nación norteamericana que lo acusa de lavar dinero del Gobierno venezolano.
El presidente Nicolás Maduro repudió estos señalamientos contra Saab y denunció que está retenido por ayudar a su Administración con la compra de medicamentos y alimentos, ante las restricciones impuestas a Venezuela por el Gobierno de Estados Unidos.
Diálogo de México
El 23 de mayo, el Gobierno de Estados Unidos decidió aliviar las sanciones contra Venezuela, y aseguró que tomó esta decisión para darle un impulso al diálogo.
Una vez confirmada esta información, el presidente de la delegación negociadora del Gobierno de Venezuela, Jorge Rodríguez, notificó al país que sostuvo una reunión con el representante de la oposición Gerardo Blyde, con el objetivo de retomar el diálogo de México, que quedó suspendido en octubre tras la deportación de Saab a Estados Unidos, y luego de dos meses de conversaciones.
«La posición de los Estados Unidos, el jefe del circo, sigue esencialmente siendo la misma. Al establishment estadounidense le interesa en Venezuela un Gobierno dócil a sus intereses y para ello requiere violentar el hilo constitucional vigente», agregó.
A juicio de Adrianza la verdadera motivación de la Casa Blanca para esta decisión es conseguir vías para subsanar las necesidades energéticas producidas por la crisis entre Rusia y Ucrania.
«Como una consecuencia de lo que sucede en Eurasia y como una conveniencia tanto para Estados Unidos como para la Unión Europea de buscar caminos que les permitan obtener fuentes de petróleo alternativas al crudo proveniente de Rusia», afirmó.
Desde 2017, el Gobierno de Estados Unidos ha aplicado más de 500 sanciones contra Venezuela, y para el analista consultado por Sputnik, aunque el diálogo es la vía correcta, duda que en el corto plazo exista un cambio radical en la política exterior de esa nación norteamericana hacia Venezuela.
Fuente Sputnik