Vuelven los casinos a Venezuela, ¿qué está pasando?

Nicolas Maduro ha implementado flexibilizaciones en áreas que Hugo Chávez Frías, el anterior Presidente de la República había restringido, a saber los casinos y la dolarización.

Venezuela llegó a ser objeto de cientos de titulares debido a su difícil situación financiera. No es un secreto que la crisis humanitaria llevó a más de 6 millones de venezolanos a dejar sus hogares, causando lo que se conoce como “el éxodo más grande de la historia reciente de América latina”. 

Contra todo pronóstico Venezuela está dando un giro en su política lo que “parece estar mejorando su economía”. Actualmente se puede ver la exhibición de Carros Ferrari en cierto concesionario de Las Mercedes. Al mismo tiempo, se puede acceder al lujoso Casino Humboldt. Cabe destacar que hace más de una década esto era imposible.

Recientemente se inauguró un nuevo casino en Venezuela, pero esta vez ubicado en la exclusiva zona de Lechería, BBH Casino Maremares en Puerto La Cruz, estado Anzoátegui. Este lugar tiene un diseño moderno y lujoso que recuerda a la Venezuela esplendorosa de antes. Esta apertura ofrece más de 300 nuevos empleos directos o indirectos.

¿A qué se debe el cambio en Venezuela?

El país cuenta con varios problemas económicos, no obstante en los últimos años Nicolás Maduro ha levantado algunas restricciones que había impuesto Chávez, una de ellas en la operación de los casinos. 

En la actualidad se puede acceder a casinos de forma presencial e incluso casinos online como casinosnuevos.cl, en el que se puede obtener cuantiosas ganancias. Lo más destacado de esta alternativa es que se puede jugar desde la comodidad del hogar sin barreras de país, lo que aporta mayor libertad de obtención de ganancias y confort.

Claro, después de 20 años de estancamiento económico, los ciudadanos deben ser precavidos. En este sentido, conviene saber identificar un Casino Online de confianza. De este modo, se reduce el riesgo de pérdida de dinero.

El país sudamericano está sumido en una dolarización de facto desde el 2019, en el que se ha observado una progresiva relajación de los controles a la economía. Actualmente, el flujo de billetes verdes ha podido dar un ligero despegue a la economía, al mismo tiempo que se ha observado una sostenida estabilización de precios.

Otro aspecto destacado en el “nuevo renacer de Venezuela” es la flexibilización de restricciones económicas por parte de Estados Unidos tras años de disputa continua. Una de las concesiones más recientes es el permiso para exportar gas licuado hasta julio de 2023; según la Licencia General 40A.

Con todo este escenario de cambios, y una Venezuela libre de hiperinflación, el Presidente de la República pretende ofrecer cambios significativos en salarios. Claro, tal como advierten los economistas, no es un camino fácil para el país sudamericano.

En realidad, los 20 años de política socialista han repercutido directamente en el bienestar del venezolano de a pie. En tal sentido, revertir los efectos de la misma no es tarea fácil. Se requiere la implementación de cambios profundos y que al mismo tiempo se genere confianza en el motor económico privado. 

A pesar de ello, es un hecho que Venezuela está gestionando cambios en el acceso de casinos, carros de lujo e incluso nuevos negocios. Lo que ha llevado al país a conseguir en supermercados marcas de productos reconocidos a nivel mundial, algo imposible después de un desabastecimiento histórico.