Hay dos formas de ver las intervenciones militares de Estados Unidos a lo largo de la historia: una como una defensa por la «libertad y la democracia» mundial, y otra como violentas campañas imperialistas de un país que fue fundado bajo la creencia de que es dueño de un continente. Este ‘gringo’ optó por la segunda.
Se trata de Jeremy Shepherd, de 31 años, creador de la cuenta de TikTok @wokkawokkawokka, una cuenta dedicada a hablar de las intervenciones militares de EEUU en todo el mundo (principalmente América Latina) y la injerencia de dependencias como la CIA para frenar gobiernos que no comulgan con la democracia del Tío Sam.
«Al llegar a la universidad me di cuenta que solo me habían enseñado propaganda y que me iban a seguir enseñando propaganda», cuenta Shepherd en entrevista para Sputnik, al recordar cuando inició sus estudios de Ciencia Política en Nueva York.
Esta propaganda aún predomina en América Latina, donde el intervencionismo político y militar de EEUU en la región aún se considera en ciertos sectores como «leyenda urbana» o «conspiranoia», a pesar de las pruebas y el propio reconocimiento del Gobierno estadounidense de sus políticas intervencionistas en elecciones de otros países. Esto fue lo que ocurrió recientemente con las declaraciones del exdirector de la CIA James Woolsey Jr, quien durante una entrevista admitió que su Gobierno ha intervenido en las elecciones de otros países, pero, justificó, «fue por el bien del sistema para evitar que los comunistas tomaran el poder».
«Me dicen: ‘Es que cuando alguien de aquí (Latinoamérica) habla de esas cosas piensan que es una teoría de conspiración, pero tú como estadounidense puedes hacerlo’. Pero yo también tengo que mostrar fuentes, no deberían creer en alguien solo por su nacionalidad», opina Shepherd.
Su cuenta de TikTok ya suma más de 1,9 millones de seguidores lo que le permite tener una audiencia a la cual presentarle contenido más exclusivo en otras plataformas como YouTube, donde ya acumula casi medio millón de suscriptores. Su público lo mismo disfruta de secciones como La propaganda gringa que aprendí en la escuela, donde contrasta la versión oficial de capítulos en la historia como la batalla del Álamo en Texas, y personajes como Gringo Man, pequeñas parodias donde se exponen las razones ideológicas y políticas de intervenciones militares de EEUU en países como Filipinas, en 1899, y en Irak, en 2003.
Sus críticas se ilustran con documentos históricos, periódicos antiguos, materiales audiovisuales y, por supuesto, memes que él mismo elabora.
«Esa información aún no llega tanto al internet en español. Una vez que empecé a buscar información libre y accesible, mi impresión fue que en inglés hay más información, te da más resultados cuando buscas algo. Yo puedo encontrar todas esas fuentes de lo que pasó en los 60, 70, las grabaciones de Nixon hablando con alguien, pero, ¿dónde está la traducción al español de eso? No existe. Si sabes lo suficiente de inglés para estar buscando eso puedes encontrarlo, pero muchos son audios. Le toca a alguien hacer más accesible esa información», considera Shepherd.
La desilusión política por EEUU
Cuando Jeremy comenzó a dudar de la propaganda que les enseñaban en la escuela, EEUU vivía un momento de intensos cambios políticos con la llegada de Barack Obama a la Presidencia; sin embargo, toda la ilusión que el demócrata despertó en los círculos más liberales y progresistas, se derrumbó poco a poco.
«Yo creo que por eso Donald Trump ganó en 2016, porque a pesar de que era republicano la gente lo vio como alguien fuera del sistema, aunque realmente no», opina.
Esta polarización y desilusión, para Jeremy, tiene mucho que ver con el hecho de que la clase política insiste en ver todo desde dos ángulos, el demócrata y el republicano, los primeros siempre como los más progresistas, pero adheridos y defensores del mismo sistema estadounidense.
Los hippies que protestaron contra la guerra de Vietnam hoy son demócratas que piden dinero para Nancy Pelosi», lamenta durante la llamada.
Parte de su trabajo —al que le dedica por video entre siete y 20 horas dependiendo del tema— también se ha enfocado a desafiar la narrativa oficial estadounidense y mostrar que, a pesar de las décadas, el discurso oficial se mantiene igual y siempre se buscará culpar «a China o a India» de los resultados desafortunados o los errores.
«Siempre es culpa de alguien, ya no es inspirador. Ya no pueden decir ‘Yes, we can’, tienen que actuar y me parece que en los últimos 10 años han sido incapaces de actuar en cualquier cosa que no sea una guerra. Si se trata de mandar dinero a una guerra o hacer guerra, nuevos drones, diseñar nuevos aviones, siempre hay dinero para eso, pero si es momento de actuar en cualquier otra cosa, cambio climático o nuestros derechos, no», critica el videoblogger.
La resistencia del imperialismo
La crítica a la narrativa imperialista no queda solo en EEUU, aunque se enfoca principalmente en el intervencionismo militar gringo, al hablar de América Latina irremediablemente también debe hablar de la conquista española, lo que la ha valido cuestionamientos de españoles que lo acusan de promover la leyenda negra, una corriente de pensamiento parecida a la que se observa también en EEUU con los críticos de la llamada teoría crítica racial.
Pero Jeremy es contundente al cuestionar la versión oficial sobre el pasado americano: «Si miras el mundo en el que vivimos te das cuenta que la historia que nos enseñaron no puede tener el resultado de este mundo».
«Yo me pregunto: ¿por qué hay iglesias españolas construidas con piedras de las pirámides que eran de antiguos dioses? ¿Porque tenían mucho respeto a sus culturas? ¿por qué no se enseña su idioma y solo se enseña español? ¿Porque vinieron como amigos? ¿Por qué les dicen conquistadores? ¡Está en el nombre! Me parece increíble que puedan decir que la Conquista fue algo bueno solo porque no fue tan grave como las intervenciones estadounidenses», considera.
Jeremy Shepherd ya prepara la segunda temporada de Intervenciones gringas ahora disponible en YouTube y plataformas como Apple Podcasts, ya que considera que agotó los recursos que le brindó TikTok en un principio y que ahora le impiden hacer una difusión mucho más amplia de la historia que los gringos no te cuentan en Hollywood o en sus escuelas.
Es difícil llevar a tanta gente a los videos largos, a los podcasts. Hice lo que pude. Ya estoy buscando una audiencia que quiera aprender esas cosas más a fondo, porque quiero hablar de esas cosas más a fondo. Siento que cuando reducimos todo a una historia de 40 segundos es como leer un artículo en Wikipedia y para ciertas cosas eso no funciona», reconoce.
Fuente Sputnik