I Antecedentes del mundo de hoy
1. Lo sustantivo del actual momento histórico de América Latina es el tránsito desde la hegemonía estadounidense resultante del fin de la Guerra Fría, a un mundo bipolar entre USA y China, más algunos países con peso económico y geopolítico. Se suma la pérdida de influencia de la Unión Europea. USA y la UE (esto es OTAN) y sus alianzas político-militares no aceptarán que emerja una gran potencia que cuestione el orden unipolar instaurado tras la caída de la URSS y la disolución del Pacto de Varsovia.
2. Su efecto ha sido el resurgimiento de la Doctrina Monroe (de 1823) que, en su origen, significó una advertencia de USA a las potencias europeas sobre su “patio trasero”. Se está dando una nueva expresión del “destino manifiesto”, término inventado por el periodista John O”Sullivan en 1845 para justificar la anexión de México y el imperialismo de USA, por ser el Pueblo Elegido. Es así como USA ha legitimado la expansión territorial y económica: sería la voluntad de Dios. Se trataría de un destino divino que habría configurado la política de buscar nuevos territorios y mayor poder. Sería el pueblo predestinado a ser el Eje del Bien.
Aquello explica que después de los atentados del 11-9-2001, Busch haya impuesto la Guerra Preventiva en reemplazo de la Guerra Fría. Entonces dijo: “La libertad y la democracia han sido atacadas (…) La guerra que nos espera es una lucha monumental entre el bien y el mal. (…) O se está con nosotros o con el terrorismo. (…) Dios está con nosotros (…) Dios bendiga a América”.
3. Ya en 1997 se había formulado el “Proyecto para el nuevo siglo de USA, para una nueva política de fortaleza militar y rearme moral”:
a) USA define quién es terrorista: aquella organización o Estado que atente contra los intereses de USA en cualquier lugar del mundo o ponga en peligro el suministro de materias primas esenciales como petróleo, gas, uranio y agua.
b) USA tiene el armamento más poderoso del mundo. Es el único país con derecho a tenerlo. Un país que pretenda equipararse será considerado terrorista.
c) USA se someterá a las decisiones de los organismos internacionales cuando estime que dichas decisiones están de acuerdo con sus intereses.
d) USA tiene el derecho de juzgar a los otros países, no según los hechos, sino según sus presuntas intenciones. Su actuación será en legítima defensa, aunque no haya habido ataque previo.
Estos planteamientos continúan hasta hoy. Trump lo expresó en el lema “América será grande otra vez”. Biden no ha trepidado en mantenerlos en la guerra de Ucrania
4. En este plano, pareciera no ser posible alcanzar un justo equilibrio, pues los medios de comunicación alimentan las neurosis colectivas. Es válido afirmar, por tanto, que estamos viviendo un “golpe de Estado” mundial. El poder económico ha cooptado al poder político. Y en el presente modelo económico no cuentan las personas. Por tanto, no hay democracia. La gran conquista del capitalismo ha sido la conquista del poder económico y del poder político con sus imaginarios y la forma de ver el mundo.
Pareciera, por tanto, imposible una democracia en medio del actual neoliberalismo y la presencia hegemónica de la economía especulativa, además de la concentración del poder económico y político. El capitalismo ha logrado convencer de que la idea de progreso, de bienestar, de riqueza, de libertad, tiene que ver con la satisfacción de los deseos naturales individuales. La acumulación productiva y el lucro como lógicas sistémicas llevan a la depredación del medio, la explotación de una clase por otra y a la rivalidad y jerarquización entre los pueblos. Los gobiernos y las transnacionales aplican estas lógicas mediante la regulación del mercado fiscal, penal, la defensa de la propiedad privada de los medios productivos y la libertad de movimiento de los capitales, la competitividad mercantil y la explotación laboral.
5. El modelo de producción y consumo que orienta la economía altera el medioambiente, extinguiendo las especies y degradando los territorios. Las corporaciones privadas globales se apropian de materias primas esenciales, destacándose la industria alimentaria mundial. Las grandes potencias están adquiriendo a gran escala zonas ricas en materias primas, tierras fértiles, zonas abastecidas de agua, privatizando bienes comunes y socavando la soberanía alimentaria.
Los Estados han sido convertidos en herramientas al servicio del capital transnacional. No obstante, la democracia para ser tal necesita incorporar la participación directa, porque un Estado democrático es regido por el poder popular y su fundamento ético mínimo de la sociedad democrática deben ser los derechos humanos.
II Algunos aspectos sobre la realidad de América Latina
2.1. Ecuador
Ha vivido un estallido social gatillado por la inflación que no permite satisfacer la canasta básica, sin existir respuesta del Gobierno y la extensión de la explotación usuraria de los Bancos hacia los agricultores.
Debe agregarse la endémica falta de trabajo y su secuela de desigualdades. El gobierno de Lasso reintegró al país al CIADI y se ha sometido a los dictámenes del FMI. La consecuencia ha sido la ausencia de inversión social.
La paralización de junio 2022 convocada por la CONAIE fue opacada por la prensa. Mientras, el movimiento social sufrió una fuerte represión. La prensa popular logró romper el cerco informativo y el Gobierno se vio obligado a aceptar el diálogo con el movimiento social.
2.2. Perú
El ascenso de Castillo a la Presidencia de la República fue precedido de un oposición violenta, racista, clasista y mentirosa. El hostigamiento de parte del Congreso ha continuado y ha mantenido al país en la ingobernabilidad. Se han sucedido cinco gabinetes, los cuales no han estado libres de personas ineptas.
El mismo Castillo se encuentra bajo cinco investigaciones penales. Las investigaciones se han extendido a su cuñada y a su esposa. El Congreso, en su pretensión de aislar internacionalmente a Castillo, ha negando la autorización para que éste asistiera al cambio de mando de la Presidencia en Colombia. No obstante, Castillo ha recibido el apoyo de los gobiernos de Argentina, Bolivia, Honduras, Colombia, Chile, Ecuador y México, lo que a la postre ha aumentado el desprestigio del Congreso.
2.3. Guatemala
Una muestra del acontecer crítico de este país es la extensión de la tala de árboles, lo que ha redundado en la sequía de ríos y de pozos. La deforestación la realizan empresas madereras, mineras, hidroeléctricas, tanto nacionales como transnacionales. Actúan en forma ilegal sin recibir sanciones. La sequía provocada por estos procesos obligan a los campesinos a comprar el agua para el uso doméstico, lo que se ha transformado en un negocio lateral de las mismas empresas depredadoras.
Los Acuerdos de Paz tras la cruenta guerra civil habían establecido la dignificación de las víctimas mediante exhumaciones; inhumaciones; medidas de verdad y de memoria; el resarcimiento cultural; la reparación sicosocial; la restitución de viviendas, de tierras, de certeza jurídica e inversión productiva. Sin embargo, la Institucionalidad de la Paz ha sido cerrada. El Presidente Alejandro Giammattei, acusado de corrupción, ha criminalizado a los magistrados y a funcionarios del Poder Judicial del área corrupción. Como secuela, los periodistas denunciantes de la corrupción han ido siendo encarcelados.
2.4. Honduras
Los pueblos indígenas también denuncian el corte ilegal del bosque, así como el no reconocimiento de los títulos ancestrales. Los campesinos carecen de acceso a derechos básicos como la salud, la alimentación, la educación. Los proyectos extractivos generan violencia, destrucción y contaminación. Las mineras se apropian de las aguas de los ríos y la mayor parte de las fuentes de agua se han secado.
Como ejemplo de lo señalado: el grupo económico Emco Holding ha sido acusado de robar agua. Este grupo económico es el concesionario del Aeropuerto Internacional de Palmerola. Al mismo tiempo, está construyendo nuevas instalaciones de la Academia Militar de Aviación ubicadas en la base Soto Cano (base militar compartida con el ejército de USA).
2.5. Haití
Unicef ha señalado que en Cité Soleil uno de cada veinte niños se encuentra en riesgo de vida por desnutrición aguda grave y el 20% de los menores de cinco años padece desnutrición grave, modesta o moderada. El recrudecimiento de la violencia desde julio 2022 ha restringido aún más el acceso a servicios sanitarios básicos. La inflación ha aumentado los precios de los alimentos.
Según ONU, entre el 8 y el 17 de julio de 2022, más de 471 personas han perdido la vida de manera violenta, han resultado heridas o se encuentran desaparecidas. Por la misma situación, tres mil personas han dejado sus hogares para huir de la violencia, siendo muchos de ellos niños no acompañados.
III Los gobiernos progresistas abren un nuevo escenario para América Latina
3.1. Colombia
La elección de Gustavo Petro como Presidente y de Francia Márquez como Vice Presidenta marca un hito sin precedentes. Petro fue senador, alcalde de Bogotá, es ex integrante del grupo guerrillero M-19, es uno de los firmantes de la paz en 1991.
Francia Márquez es afrodescendiente y representa a los sectores siempre marginados. Uribe y Duque, con el Centro Democrático, cayeron ante el Pacto Histórico que logró unir a fuerzas políticas antes separadas.
Duque dejó al país quebrado por un modelo económico que incrementó la pobreza; perpetró innumerables asesinatos; destruyó el Acuerdo de Paz; dejó al país inviable por la corrupción y la fuga de capitales; máxima expresión del descalabro ha sido el paro armado de los paramilitares del Clan del Golfo, en mayo de 2022.
De acuerdo a información de Indepaz dada en agosto de 2022, el gobierno de Duque ha dejado como una de sus herencias a 957 líderes asesinados; 220 desaparecidos; 313 masacres; 555 secuestros; 545 eventos de desplazamientos forzados.
En torno a los Acuerdos de Paz, el Instituto Kroc ha señalado que, al 2022, la reforma rural ha avanzado sólo 4%; el 37% de las disposiciones de los Acuerdos de Paz se encuentra en estado mínimo y el 15% aún no ha iniciado su implementación; 261 firmantes del Acuerdo de Paz han sido asesinados.
Por otra parte, el déficit fiscal asciende a $83 billones adeudados a los programas sociales. El Programa de Ingreso Solidario por Pandemia destinado a cuatro millones de hogares, carece de financiamiento. La Fundación para la Libertad de Prensa ha confirmado que en el presente año hay 776 periodistas amenazados, cinco asesinados y 441 agredidos por la fuerza pública durante el ejercicio de su profesión.
En el 2021, un 39% de la población se encontraba en pobreza y se contabilizaron seis millones cien mil personas en extrema pobreza. Según la FAO, siete millones doscientos mil colombianos se encuentran con déficit de alimentos. El desempleo alcanza al 12,1%. Mientras, cuarenta y seis mil millones de pesos fueron destinados a contratos de imagen de Duque. Su equipo de comunicaciones se elevó de 15 integrantes a 54, para lo cual fueron usados dineros del Fondo de Programas Especiales para la Paz. Al mismo tiempo se ha implementado el fracking. Este se implica con la devastación de 700.000 hectáreas de selva deforestadas.
Lo anterior decantó en el “estallido social”, incrementado por una reforma tributaria que ha afectado a la clase media y a los pobres. De allí la relevancia del Pacto Histórico, que está centrado en la paz duradera, la que se haría perdurar a través de políticas de distribución y un categórico no al extractivismo, lo que se implica con la compatibilización entre el desarrollo de las empresas y el respeto al medioambiente.
El núcleo del planteamiento de Petro radica en el respeto a los Acuerdos de Paz, los que se abren a acuerdos con el ELN. Esto tiene como consecuencia la eliminación de la noción de “enemigo interno”; la detención del fracking; la decisión de convertir a Colombia en potencia del medioambiente; la valoración de los pueblos indígenas y afrodescendientes, dado que son los protectores de la tierra y los defensores del agua. Ellos son los cuidadores de la vida. Petro también quiere disminuir la violencia a través del control de las armas y el control del mercado de la cocaína. Esto, porque ya en 2017 había cinco millones de armas en posesión de civiles y cuatro millones de ellas serían armas sin registrar. Como consecuencia, resulta indispensable un diálogo con México, porque la cocaína enviada a USA se devuelve en armas hacia Colombia vía México.
A modo de síntesis sobre las expectativas en torno a Petro: el nuevo gobierno ha delineado una agenda de paz y, paralelamente, una agenda de medioambiente. Su viabilidad depende de su inclinación hacia los sectores populares o el riesgo de su inclinación hacia las élites. De allí la relevancia de Francia Márquez: la Vice Presidenta representa el vínculo con el pueblo, a fin de que el gobierno no se desvíe hacia el centro.
3.2. Brasil
El triunfo de Lula en la próxima elección presidencial pareciera inminente. Bolsonaro no reconocería el eventual triunfo de Lula y, presintiendo un enjuiciamiento por su gestión, ha afirmado que se defenderá “con pistola en mano”. La represión ha sido una característica de Brasil y, particularmente en el gobierno de Bolsonaro han proliferado las masacres en las favelas y en los campos.
Recientemente, 340 familias han sido desalojadas de una comuna del MST en Río do Fogo, en Costa de Río Grande del Norte. Sin duda que uno de los aspectos de mayor gravedad es la destrucción de la Amazonía: sólo desde 2019 han sido destruidos más de 10 mil Km2, con las ya sabidas secuelas para la humanidad.
3.3. Argentina
Se supone que su gobierno es progresista. Es la imagen que proyecta hacia el exterior.
Argentina pasa por una aguda crisis económica, implicada con la endémica corrupción de la política de ese país. Las organizaciones sociales han reiterado sus manifestaciones en busca de diálogo con las autoridades económicas. Piden, además, bonos de emergencia y el cese de las persecuciones.
La Vice Presidenta de la República ha sido enjuiciada bajo acusaciones de corrupción. Y de lo que la prensa no habla es de la situación del pueblo mapuche, víctima del despojo tras la “Guerra del Desierto” en el siglo XIX y que hoy continúa acosado por las transnacionales.
3.4. Chile
El Estado oligárquico se mantiene en pie, con distintas máscaras. La Constitución de 1980 ha sido el dique más patente para detener el progreso, la cultura, la democracia, la depredación del medioambiente.
La rebelión de octubre de 2019 remeció a todas las instituciones. Se encauzó la agonía del sistema mediante vías burocráticas. Fue una salida de emergencia: la Convención Constitucional. Pero el movimiento social ha carecido de dirección política. Emergió al margen y en contra de los partidos políticos, los que se han convertido en cúpulas de poder alejadas de las bases sociales.
El plebiscito del 4 de septiembre nuevamente pondrá en juego las alternativas ya tradicionales: pueblo – oligarquía; explotados-explotadores; democracia-dictadura; igualdad-privilegios.
La propuesta de nueva Constitución sí puede permitir la apertura de condiciones para la organización sindical, social y política; el respeto a los derechos humanos; la protección del medioambiente, etc… Por presiones de partidos políticos de “izquierda” con representantes en la Convención Constitucional (Partido Socialista y Partido por la Democracia) y que reciben aportes económicos del gran empresariado, la asamblea no tuvo suficientes votos para examinar los Tratados de Libre Comercio (TLCs), así como tampoco se reivindicó la nacionalización del cobre.
Es innegable que la actual izquierda carece de contenidos teóricos para ser revolucionaria. Como consecuencia, carece de ética, no tiene dirección, está fragmentada, se ha quedado en discusiones infantiles, se ha alejado de la realidad.
Allí radica la debilidad del actual proceso. Porque una Constitución es sólo un papel si no hay fuerzas sociales y políticas que conduzcan a hacerla realidad.
3.5. México
México también tiene un gobierno “progresista”. Pero la violencia y la corrupción impiden que camine más allá de los límites impuestos por los dueños del poder. Quienes se les enfrentan, deben estar dispuestos a las represalias.
A modo de ratificación y de síntesis de lo que sucede en México: sólo en 2022 van 13 periodistas asesinados. Aún no se esclarecen las desapariciones de los estudiantes de Ayotzinapa ni de las innumerables víctimas del narcotráfico y del tráfico de personas.
IV Conclusión
Hoy, pareciera que para USA lo más importante consiste en bloquear, frenar, impedir la transición hacia un mundo multipolar. Centroamérica y El Caribe siempre han sido zonas de dominio exclusivo y excluyente del imperio del norte, con intervenciones militares reiteradas. América Latina sigue siendo retaguardia y reserva estratégica de USA. En este marco, Brasil resulta ser una pieza clave: Lula como Presidente significaría un revés estratégico inaceptable. Chile, el modelo de los modelos del neoliberalismo está siendo subvertido y sometido al peor de los desafíos: el poder constituyente del pueblo y la elaboración de una Constitución democrática, cuyo centro es la soberanía política, económica y cultural, además de la independencia nacional.
USA necesita una victoria política que no sobrepase a los consensos y a la gobernabilidad del sistema, especialmente cuando se encuentra en lucha con China por el dominio del planeta y China es el mayor socio comercial de Brasil, Chile, Argentina y Perú. Las anunciadas reformas económicas y políticas se están dando en el marco de la competencia entre las grandes potencias. Se agrega la amenaza de una guerra nuclear. Tras la visita de Nancy Pelosi a Taiwán, China ha realizado maniobras militares con “fuego real”, bloqueando así a Taiwán. Esto ha afectado a 18 rutas aéreas internacionales y más de 900 vuelos han sido obligados a modificar sus rutas. En vista de ello, los cancilleres del G-7 han señalado que “las acciones amenazantes de Pekín” pueden conducir a una escalada innecesaria. Por su parte, el Secretario de Estado de USA, Blinken, ha dicho que “el papel fundamental de las armas nucleares estadounidenses es disuadir los ataques nucleares” contra su país.
Dentro de este marco, no se puede desconocer la existencia de una crisis de alternativa ideológica: dadas las experiencias del pasado, se está en tránsito hacia un nuevo sistema de socialismo que no debería dejar de mantener la crítica marxista hacia el capitalismo. Tampoco es dable olvidar que la pandemia y la crisis de Ucrania expresan la aceleración de la crisis del momento actual. El mundo está subordinado a las potencias.
En esta tensión, el dilema de los gobiernos progresistas es: o aliarse con el centro o la derecha haciendo maquillajes de reformas, o ser efectivamente revolucionarios. Las actuales olas progresistas se están dando en medio de las crisis estructurales del sistema capitalista. Esta situación es la que demarca los límites de los gobiernos. Se corre el riesgo de que la política se convierta en un espectáculo, en una mercancía más, en representación ficticia de la sociedad. Su traducción sería la degradación de la democracia.
El actual panorama muestra un futuro imprevisible, puesto que estamos viviendo una crisis global implicada con un colapso ecológico también global. La pandemia del Covid-19 es un síntoma de la crisis de la relación hombre-naturaleza.
El cambio climático, más la pandemia, más la guerra, dan como resultado la hambruna. Es necesario reconocer que la globalización ha contribuido a la inseguridad alimentaria: al haber sometido a los productores del mundo a la competencia económica, se ha conducido a la quiebra a millones de pequeños agricultores. Porque al haberse volcado la producción agrícola a los monocultivos más rentables, se han postergado cultivos de primera necesidad, debilitándose así a los sistemas de alimentación nacionales. Por de pronto, la ONU ha afirmado que el conflicto de Ucrania está amenazando con condenar al hambre a decenas de millones de personas. A esta situación, la FAO la ha denominado “tsunami silencioso”: para eludir las alzas, algunos países han incrementado la producción de biocombustibles, lo que ha repercutido en los precios del maíz, del azúcar y otros productos indispensables.
Como ejemplo de lo antes señalado: Moscú y Kiev exportan 1/3 del trigo comercializado del mundo. Esto significa que aportan el 12% de las calorías alimentarias del planeta. Mientras, en América Latina y El Caribe el hambre ha aumentado desde el año 2000, a tal punto que entre 2019 y 2020 ha habido un aumento de 30% de personas padeciendo hambre. Sólo en 2021 se contabilizaron 59 millones 700 mil personas con hambre en América Latina. La inseguridad alimentaria afecta al 41% de la población (esto es, cuatro de cada 10 personas).
Dados el declive de la energía, el agotamiento de los minerales por el extractivismo indiscriminado y el cambio climático, el planeta ha entrado en la fase de colapso. La pandemia ha demostrado que el crecimiento indefinido, fruto del capitalismo desbocado, ha llevado a la humanidad al borde de la extinción. La Tierra, sometida por la globalización tecno-científica, ha sido sometida a una explotación voraz e incontrolada. El paso siguiente en esta vía es el abismo. El 23 de septiembre de 2008 la Tierra sobrepasó en un 30% su capacidad de reposición de los recursos necesarios para las demandas humanas. Como corolario, se acrecientan las desigualdades, porque un 20% de los más ricos absorben el 84% de la riqueza y el 20% más pobre recibe el 16%. Quienes tienen poder económico, político y militar, siguen manteniendo su nivel de vida a costa de dejar fuera a la mayoría de los habitantes del globo. El hambre conduce al cambio de las reglas del juego: allí está la raíz de las explosiones sociales.
Ya nadie puede negar que el sistema extractivista está exprimiendo la vida, agota la tierra y expulsa a las personas. Y cuando se vive bajo la línea de lo mínimo, es difícil mantener relaciones normales de humanidad.
En este panorama, los gobiernos progresistas deben mantenerse sin degradarse. Para ello, requieren de la organización social. Esta posibilita la formación de la conciencia política. La institucionalidad de gobierno sin el respaldo organizado y consciente de “la calle”, flotará en el vacío, con el riesgo de “dulcificar” los límites del discurso para conseguir apoyos mayoritarios. Las inyecciones de neoliberalismo que colonizan a las juventudes y al pueblo en general, se transmiten por los medios de comunicación, por las redes, por los estudios, por los libros, etc… En consecuencia, los gobiernos progresistas tienen como principales desafíos la unidad del pueblo y del gobierno con el pueblo; deben crear las condiciones para fortalecer las acciones en los distintos territorios; necesitan la elaboración de un paradigma del progresismo desde los pueblos, recogiendo las múltiples demandas; es indispensable la creación de redes de comunicación; se tiene que ir evaluando permanentemente lo que se está haciendo, enfatizando la dignidad como fin superior. Porque toda victoria que no se convierte en otra victoria, se convierte en derrota.
Los nuevos paradigmas deben pensarse para abrir cauce a los nuevos movimientos ecologistas, feministas, de género, indígenas, sin dejar de lado los paradigmas anteriores. Se trata de construir sin destruir.
Por Hervi Lara
Comité Oscar Romero – SICSAL -Chile / Observatorio por el Cierre de la Escuela de las Américas-SOAWatch-Chile.
Santiago de Chile, agosto de 2022