El Consejo de Defensa del Estado (CDE) solicitó a la ministra en visita Romy Rutherford que se cite a declarar en calidad de “inculpado” al ex comandante en jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre Espinosa, por malversación de caudales públicos.
Esto, luego de que se pidiera a la ministra en visita que se amplíe el auto de procesamiento de los ex comandantes en jefe del Ejército Óscar Izurieta y Juan Miguel Fuente-Alba, en la arista Fuente Alba, “F-A”, por los delitos “reiterados” de malversación de caudales públicos.
En el escrito, presentado el pasado 13 de septiembre, el CDE considera que en virtud de los antecedentes que maneja puede atribuirles participación en otros delitos de la misma especie.
Los argumentos del organismo presidido por Juan Antonio Peribonio dan cuenta que “obran en la causa elementos probatorios, múltiples, precisos, concordantes y graves, que permitieron a SS. Iltma. tener por justificada la existencia de sendos delitos reiterados de malversación de caudales públicos, así como presunciones fundadas de participación en ellos de los Generales hoy retirados, Óscar Ozurieta Ferrer, Juan Fuente-Alba Poblete y de Humbert Oviedo Arriagada, según consta de los autos de procesamiento de fechas 19 de febrero y 29 de junio de 2019, y de 14 de febrero de 2022”, refiere BíoBío.
En la misma solicitud, el Consejo de Defensa del Estado solicitó que se cite a declarar en calidad de “inculpado” al ex comandante en jefe del Ejército Juan Emilio Cheyre Espinosa, debido a que se presume que ha participado en la comisión de un delito, pero que aún no se recaban todos los antecedentes suficientes para que se dicte el auto de procesamiento en su contra.
Tras la presentación efectuada por el CDE, la ministra Rutherford tiene la palabra, quien optó por citar a Cheyre para el próximo 27 de septiembre con el propósito de tomarle declaración en la indagatoria y resolver si lo suma o no al procesamiento.
Cheyre ya enfrentó a los tribunales en 2018, siendo condenado por el delito de encubrimiento de 15 asesinatos en La Serena, durante el paso de la Caravana de la Muerte, en 1973, refiere Resumen.
En este caso, el exmilitar fue condenado con una pena de tres años de libertador vigilada.