Durante el primer semestre de este 2022, el sistema escolar y de educación parvularia funcionaron con clases y actividades presenciales de lunes a viernes. Pero, a pesar de las mejoras respecto a los niveles alcanzados al cierre del 2021, la inasistencia y desvinculación de los estudiantes y párvulos persisten como desafíos críticos en este 2022.
De acuerdo a cifras entregadas por informe Monitoreo de Establecimientos Educacionales en Pandemia 2022, entre un 68% y un 77% osciló la asistencia diaria de los estudiantes del sistema escolar en promedio durante el primer semestre, y en torno al 3% no tuvo contacto con su establecimiento en las semanas analizadas. Esta cifra representa a aproximadamente 100 mil escolares en todo el país.
En la educación parvularia, en tanto, la cifra de niños y niñas que no han podido ser contactados llegó al 18%, lo que comprende a cerca de 70 mil párvulos.
Este monitoreo es realizado por investigadores del CIAE de la Universidad de Chile, la Escuela de Gobierno y el Instituto de Sociología de la Universidad Católica, en colaboración con el Centro de Estudios del Ministerio de Educación y la Subsecretaría de Educación Parvularia, y el apoyo de Fundación BHP.
Al respecto, Juan Pablo Valenzuela, director del CIAE de la U. de Chile, plantea que la asistencia promedio en la educación parvularia históricamente ha sido más baja que en el resto del sistema, pero con la pandemia se ha visto aún más reducida: “Solo la mitad de los niños matriculados en jardines infantiles está asistiendo, esto es para todas las dependencias, con excepción de los jardines particulares. Además, 2 de cada 10 niñas y niños matriculados no ha podido ser contactado”, dijo el investigador.
Por esta razón, agrega Susana Claro, académica de la Escuela de Gobierno de la UC, “para todas las dependencias la asistencia ha sido un desafío prioritario. Esta fue bajando durante el primer semestre con una recuperación pequeña al regreso de las vacaciones y, por lo tanto, es un tema que todavía demanda esfuerzo de todos”.
Así, a partir de estos resultados, Valenzuela y Claro sostienen que “el grupo de estudiantes sin ningún tipo de contacto con su establecimiento debiera ser prioritario para los establecimientos, de manera que ningún estudiante quede sin vinculación el resto del año”.
En ese sentido, los investigadores especificaron que un total de 2.732 establecimientos del sistema escolar han participado en al menos una de las cuatro encuestas de este monitoreo, y 1.042 han participado en más de una.
Recomendaciones para política pública
Entre las recomendaciones para la política pública, el reporte menciona la necesidad de fortalecer la asistencia presencial de los estudiantes, con especial foco en los niños, niñas y jóvenes que no se han vinculado con sus establecimientos educativos en todo el semestre. Por otra parte, indica la importancia de hacer los esfuerzos pertinentes para retomar la jornada regular en cada establecimiento del sistema escolar (jornada que tenían los mismos establecimientos antes de la pandemia).
Asimismo, proponen desarrollar mecanismos y metodologías que permitan acelerar el aprendizaje colectivo del sistema para la recuperación de aprendizajes y bienestar emocional de estudiantes, identificando y compartiendo buenas prácticas que estén aplicando los establecimientos.
En este sentido, el 82% de establecimientos que participaron en la encuesta de junio declaró estar implementando estrategias y mecanismos que buscan revertir los altos niveles de inasistencia que han marcado este primer semestre del año escolar, como contactar a los apoderados de estudiantes con alta inasistencia y/o visitas domiciliarias.
Por último, los autores del reporte también recomiendan la necesidad de dar mayor apoyo a los docentes y equipos educativos para reforzar sus esfuerzos.
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