Hacer frente a los crecientes impactos de la crisis climática podría atraer recursos y desviar la atención de los esfuerzos para reducir las emisiones de carbono, lo que empeoraría aún más la situación y desencadenaría un “bucle de fatalidad” climático.
Así lo advirtieron un grupo de expertos al referirse al claro daño causado por el calentamiento global y señalar los miles de millones de dólares que cuesta recuperarse de los desastres climáticos, que pueden causar problemas en cascada como crisis de agua, alimentos y energía, así como un aumento de la migración y los conflictos, todo lo cual agota los recursos de los países.
En un informe presentado por los investigadores del Instituto de Investigación de Políticas Públicas (IPPR) y Chatham House, señalan que el debate sobre si mantener el aumento de la temperatura global por debajo de 1.5C°, complica los esfuerzos para reducir las emisiones y otras acciones.
Aquellos que argumentaban que 1.5C todavía era posible se arriesgaban a perpetuar la complacencia de que el lento ritmo de acción actual era suficiente, dijeron los investigadores, mientras que aquellos que argumentaban que no era posible se arriesgaban a apoyar el fatalismo de que ahora se podía hacer poco, o “enfoques extremos” como la geoingeniería, reseña The Guardian.
“Este es un ciclo fatal: las consecuencias de la crisis [climática] desvían la atención y los recursos para abordar sus causas, lo que conduce a temperaturas más altas y pérdida ecológica, que luego crean consecuencias más graves, desviando aún más la atención y los recursos”, detalla el documento.