Con preocupación dirigentes del Movimiento Ciudadano NO a las Termoeléctricas, dirigido por los presidentes de las juntas de vecinos de Iquique, ha quienes se les han sumado organizaciones sociales, como sindicatos de tripulantes, camioneros, los profesores, C.U.T, organizaciones estudiantiles, juveniles y culturales, uniéndose contra la ampliación de la termoeléctrica ya existente y la instalación de tres nuevas de estas, en la ya saturada zona de Patache , al sur de Iquique.
La sobre carga que ya tiene la bahía por los puertos industriales existentes, constataron en terreno los sondajes que está realizando la empresa ligada a la instalación de la termoeléctrica Pacifico, la que está trabajando en la zona proyectada para su construcción, pese ha que aun no ha sido autorizada oficialmente la instalación de está, y contando con una fuerte negativa por parte de las organizaciones sociales de Iquique, que ya cuenta con cerca de 22 mil firmas de ciudadanos que se oponen a esta construcción.
Según Sonia Moreno Rodríguez, presidenta de la junta de vecinos de la caleta de pescadores de Chanavaya, borde costero al sur de Iquique, “se ha buscado en la municipalidad y no existe ninguna autorización para trabajar en el terreno, no debería estar sucediendo todo lo que hemos denunciado, las máquinas trabajando y el terreno demarcado”, para ella “…las autoridades regionales son mas peligrosas que las mismas termoeléctricas y no podemos entender por que la autoridad regional tiene un discurso muy diferente al de la Presidenta de la Republica cuando dice sobre energías limpias y renovables”. Para la señora Moreno, los trabajos que se detectaron en la zona en plena ejecución y las señales, estacas y demarcaciones presentes, son la clara muestra de que “La autoridad una vez más le miente a la población, una vez más esta ciega y decide a espaldas de la ciudadanía de Iquique”.
Estas declaraciones las entrego junto a Esteban del Rio, presidente de la junta de vecinos 22 el Morro, vocero del Movimiento Ciudadano NO a las Termoeléctricas, mientras se recorrían la zona.
Arturo Neira, ingeniero acuicultor y miembro del movimiento, señaló que “En la zona se puede apreciar el impacto del carboncillo proveniente de la actual termoeléctrica”, he hizo, un llamado urgente a que “la comunidad primero debería asumir que hay un problema serio que los afecta, no solo en este momento presente, sino también a futuro,… y en ese sentido tiene que asumir la responsabilidad para organizarse”.
Los dirigentes de este movimiento, se mantienen en estado de alerta para informar a la comunidad, invitando a todos los actores sociales a sumarse a este esfuerzo, por preservar el medio ambiente regional, continuando con el proceso de recolección de firmas, como la realización de marchas y a corto plazo la realización de un viaje a la capital, para reunirse con autoridades nacionales, y mostrar el descontento de la comunidad con estas instalaciones, altamente contaminantes.
Por Felipe Olaechea
Escritor y Documentalista