En la región del Bíobío, en Quilaco, un niño de nueve años de edad que era estudiante del Liceo Bicentenario Valle Del Sol, falleció producto de un infarto.
A pesar de que la madre hizo todo lo posible para trasladarlo hasta un centro de atención médica, el menor llegó sin vida debido a la distancia de su hogar al nosocomio más cercano.
En medio del paro cardíaco que sufría el pequeño, la mujer en su desesperación, pidió ayuda a sus vecinos para llevarlo al centro de salud familiar (Cesfam) para que recibiera atención de urgencia.
Sin embargo, debido a la distancia del lugar y el mal estado del camino donde reside, a unos 20 kilómetros del área urbana, el menor llegó sin vida, reseña BíoBíoChile.
Pablo Urrutia, alcalde de Quilaco, descartó los rumores de que supuestamente se haya solicitado ambulancia y esta haya llegado tarde.
Informó que van a conversar con las empresas forestales que explotan bosques en la zona para que se puedan enrolar los caminos públicos y privados, para hacer que el acceso a estos lugares apartados sea más expedito para las familias y los equipos de emergencia.