Una deriva autoritaria que debilita la democracia

Por Codepu

Tras las lamentables muertes de funcionarios de Carabineros en procedimientos policiales se ha generado una peligrosa dinámica autoritaria y punitiva que aleja al Estado chileno de sus obligaciones de respeto a los derechos humanos e implica una deriva autoritaria y un evidente retroceso democrático.

El populismo punitivo, como tendencia, convierte una legítima demanda de la sociedad en propuestas engañosas que solo apelan al uso de la fuerza irracional con fines claramente retrógrados y que no reducen las tasas de criminalidad. Para combatir la inseguridad se requiere un enfoque multifactorial que no atente contra la justicia y la democracia. Por eso rechazamos la recientemente promulgada ley de legítima defensa privilegiada dado que significa un evidente retroceso.

El camino del populismo conlleva una peligrosa deriva autoritaria que salvaguarda estructuras sociales injustas, favorece a los sectores más conservadores y reaccionarios, alienta una cultura del miedo y sacrifica derechos y libertades individuales restringiendo aún más la democracia.

Recientemente, dos hechos recientes nos preocupan y alertan y no podemos guardar silencio.

La censura que el general de Carabineros, Álex Chaván, impone en su condición de funcionario público a una  periodista es un grave atentado a la libertad de expresión. Es un impedimento al ejercicio profesional del periodismo y pone en riesgo el derecho a la información. El veto es un acto grave pues la periodista pidió inmediatamente disculpas y existen precedentes en fallos judiciales que señalan que impedir que un periodista participe de un punto de prensa constituye una amenaza a la libertad de emitir opinión y de informar. Megamedia, la empresa televisiva, informó con celeridad del despido de la profesional lo que es una medida desproporcionada e intolerante.

Por otra parte, las instrucciones imperativas que ha dado el fiscal nacional Ángel Valencia con la finalidad de someter a prisión preventiva a todos los extranjeros que sean detenidos y no cuenten con documentos de identidad. Esta es una decisión aberrante desde el punto de vista del derecho penal, del derecho constitucional y de la doctrina de los derechos humanos. En efecto, la sola condición de extranjero e indocumentado no implica ningún grado especial de peligrosidad social.

Es necesario considerar que la migración tiene múltiples motivos, las hay por razones económicas, políticas, tráfico de personas, engaño y en aquellas circunstancias es muy normal que hayan incumplido las normas de migración que son temas administrativos y no penales. 

El instructivo del fiscal nacional es una clara deriva autoritaria pues sanciona la peligrosidad de una condición natural, una condición personal, la condición de migrante. No se está sancionando una conducta o acto que es la definición de un delito. De allí lo aberrante, desproporcionado y discriminatorio de la decisión del Ministerio Público. Más aun cuando en la mayoría de los casos es el propio Estado el que dificulta su obtención. Recordamos que alentar la xenofobia y el racismo tiene antecedentes luctuosos y lamentables en la historia de la humanidad.

Finalmente, queremos señalar que en el año en que se conmemoran los 50 años del golpe militar, nuevamente Chile está siendo objeto de observancia internacional como un país que se acerca peligrosamente hacia situaciones que en el pasado generaron profundo dolor al pueblo chileno.

Ni un golpe más para Chile.

CODEPU

7 de abril de 2023

Columna publicada originalmente el 8 de abril de 2023 en codepu.cl