El Juzgado de Garantía de Coyhaique declaró culpable de «vejaciones injustas» al funcionario de Carabineros identificado con las iniciales D.E.L.P., delito perpetrado en noviembre de 2019, durante la revuelta social. En este caso, la sede de Aysén del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) actuó como querellante.
El uniformado fue sentenciado en un juicio oral simplificado a 61 días de cárcel, pero el tribunal resolvió darle el beneficio de la remisión condicional, es decir, la sustitución del cumplimiento de la pena de cárcel «por la discreta observación y asistencia en libertad del condenado ante la autoridad administrativa durante cierto tiempo».
Los hechos
Los hechos ocurrieron el 6 de noviembre de 2019 en Coyhaique, en el marco de una manifestación de jóvenes y estudiantes en la salida sur de la ciudad.
La víctima fue detenida porque se le atribuyó ser el autor de las lesiones sufridas por un carabinero, imputación que luego se demostró como falsa.
Cuando la víctima era llevada por tres carabineros al carro policial, se acercó D.E.L.P., entonces funcionario de Fuerzas Especiales, y sin justificación la agarró de los genitales y se los apretó, desistiendo cuando empezó a gritar.
En cuanto a la falsa imputación de agresión, el coronel (r) de Carabineros P.J.C.C. y el capitán y jefe de Fuerzas Especiales, J.F.F.F., afrontan un juicio oral por el delito de obstrucción a la investigación, que está programado para junio.
A ambos se les acusa de haber imputado falsamente la agresión a la víctima y ocultar la prueba que lo liberaba de responsabilidad. En esta causa, la sede de Aysén del INDH también actúa como querellante.
«La sede regional actuó desde un inicio en estos hechos, concurriendo a la comisaría a verificar el estado de salud de la víctima cuando se encontraba detenida y después en el juicio, insistiendo en el carácter injustificado y vejatorio de la agresión sufrida por la víctima», señalaron desde la entidad.
Foto Portada: Referencial (archivo)
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