“El nuestro será el primer gobierno ecologista de la historia de Chile, implementando políticas sustentables en todas las materias y así avanzar al fin del extractivismo, que pone en peligro la naturaleza y la vida acelerando la grave crisis climática que vivimos”.
Es lo que posteaba en su cuenta de Twitter el actual presidente Gabriel Boric, en la recta final de su campaña que lo llevó a La Moneda. Entonces también dijo que su compromiso contra el cambio climático “era total” y que en caso de ganar las elecciones el suyo sería “el primer gobierno ecológico de la historia de Chile”.
Apenas terminado el plebiscito del 4 de septiembre, nombró como ministra de Interior a Carolina Tohá (PPD) que en su primera intervención en televisión reflotó el TPP11 promoviendo su aprobación la que se vio materializada el mismo mes de septiembre.
Ubicado en las cumbres andinas, en la comuna de Lo Barnechea y a tan sólo 50 kilómetros de Santiago, el proyecto Los Bronces consiguió la aprobación del “Comité de Ministros” este lunes 17 de abril para extender la explotación de la mina Los Bronces (de Anglo American) hasta las proximidades del Santuario de la Naturaleza Yerba Loca.
Los responsables de tomar esta decisión fueron los ministros de Medio Ambiente, Maisa Rojas; Energía, Diego Pardow; Minería, Marcela Hernando; Salud, Ximena Aguilera; Agricultura, Esteban Valenzuela, y la subsecretaria de Economía, Javiera Petersen (PC).
A última hora, el ministro de Economía Nicolás Grau se inhabilitó de votar debido a dichos emitidos en El Mercurio que podrían haber sido considerados favorables a la empresa.
Resulta insólito que los titulares de Medio ambiente, Agricultura, y Salud hayan aprobado esta iniciativa en circunstancias que las áreas que ellos representan podrían ser las más afectadas. Lo de Maisa Rojas ya no sorprende dada la gestión que ha tenido este primer año de gobierno en la defensa y promoción del medio ambiente, pero lo de Valenzuela es simplemente lamentable, dada la trayectoria e imagen que había logrado construir este político. Lo de la titular de Salud, ya no tiene explicación.
Recordemos que este proyecto ya había sido rechazado por el Servicio de Evaluación Ambiental -en 2022- al no poder descartar el riesgo a la salud de la población cercana. Los Bronces Integrado aumentará considerablemente las emisiones de contaminantes en una zona saturada, lo que afectará directamente a los glaciares que dan origen a los ríos que abastecen el Maipo y el Mapocho, además de contaminar el ya sobrecargado aire de Santiago.
Esto, sin considerar las tóxicas tortas de relave que este proyecto heredará al territorio y sus comunidades. Todo, para favorecer a una transnacional que se ha caracterizado por contaminar el territorio y saquear nuestras riquezas minerales.
Resulta impresentable que un gobierno “ecologista”, contradiga lo señalado por la propia institucionalidad ambiental y apruebe una iniciativa que pone en riesgo la vida de cerca de la mitad de los habitantes del país (que habitan en las regiones de Santiago y Valparaíso).
Las comunidades organizadas ahora tendrán el campo abierto para actuar autónomamente y bregar en tribunales, en las calles y deliberando en donde sea factible, con el fin no sólo de detener este proyecto aberrante.
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