Un día como hoy, pero de 1809, fallecía en Greenwich Village, Nueva York, el escritor y revolucionario inglés Thomas Paine.
Heredero de los ideales de la Ilustración, pensador incansable que arguyó por la necesidad de implementar a la política los ideales de los derechos humanos, migrante y revolucionario, Paine es considerado en la actualidad uno de los Padres Fundadores de los Estados Unidos de América, a pesar de no ser nativo de ese país.
Pero, ¿qué nos importa a los latinoamericanos la historia de Estados Unidos o las ideas que inspiraron su independencia de la corona británica? ¿Hay algo ahí que nos pueda servir de inspiración? Respondamos estas preguntas iniciales con un cuestionamiento incómodo.
¿Qué es una corona y para qué sirve?
¿Recuerda usted, querida lectora, querido lector, todo el revuelo que se armó cuando la reina Isabel II colgó los tenis el pasado 8 de septiembre de 2022? ¿O cuando se vino la coronación de Carlos III y su esposa Camila en mayo del presente año? Todos los medios reportaban el asunto hasta en sus pormenores, incluyendo los latinoamericanos, porque…. bueno, era algo que había que reportar, porque era trending topic y tránsito garantizado para cualquier portal que se subiera a dicho tren.
Y si algún ciudadano británico se atrevía a protestar durante la coronación de Carlos, pues simplemente se hacía referencia a él como un loquito, como los que hay en cualquier parte. No había necesidad de profundizar en sus motivos, o de entrar en esas honduras de la legitimidad de la monarquía, porque ese no era el punto. El punto era reportar sobre lo que todo mundo estaba reportando y sanseacabó.
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Para Thomas Paine, el problema de la legitimidad de la corona era precisamente el punto. Nunca quitó el dedo de la llaga, ni cuando el gobierno de William Pitt el Joven lo categorizó como sedicioso y emprendió su cacería.
Tras una serie eventos desafortunados en Inglaterra, donde trabajó como un burócrata poco prolijo y dispendió sin prudencia la herencia de muchacha con quien casó, y de quien se divorció cuando se le acabó el dinero, Paine migró a las entonces Colonias Americanas a fines de 1774. Cuentan que enfermó de gravedad durante la travesía y lo bajaron del barco en condición pre-cadavérica.
Una vez repuesto, colaboró regularmente con artículos para la Pennsylvania Magazine, una publicación periódica de corte progresista de la que llegó a ser editor general. En su tiempo libre, bocetaba un ensayo retador de la monarquía que terminaría titulando Sentido Común, cuya publicación logró en 1776. El escrito, que se distribuyó masivamente en la presentación de panfleto, alcanzó entre los habitantes de las colonias una popularidad sin precedentes.
Las idea principal de Sentido Común es la siguiente: puesto que la sujeción a Inglaterra no acarreaba ningún beneficio a los habitantes de las colonias americanas, urgía que estas se independizaran.
Una corona, y en particular el gobierno que de ella emana, sirve para gobernar, y un gobierno sirve para proveer un orden que los individuos, por su propia falibilidad humana, necesitan que se les imponga si lo que se desea es salvaguardar a la sociedad del caos.
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Pero cuando la corona termina por ocasionar más injusticias y males que los que podría solucionar, entonces se vuelve un imperativo derrocarla. Porque hasta que esto suceda, los súbditos estarán financiando la tiranía que se les impone.
Paine cuestionaba incluso la legitimidad de la Monarquía inglesa, que aunque en teoría era parlamentaria, resultaba ridículo pensar que existiera un balance entre los tres poderes que la constituían. Y este era apenas uno de los múltiples absurdos que Paine detectaba en la Constitución inglesa.
Además, reprochaba que dicha monarquía exigiera impuestos cada vez más altos sobre las colonias, y que ejerciera sobre ellas todo tipo de tiranías y arbitrariedades, sin ofrecer ningún beneficio real a cambio.
El legado
God save the queen
the fascist regime
they made you a moron
a potential H bomb.
Sex Pistols
Hasta nuestros días, Sentido común se mantiene como un referente en los argumentos contra la idea de monarquía. Y es que si lo pensamos bien, parece un tanto ridículo que en pleno siglo XXI se mantenga vigente una institución de gobernanza fundamentada en la idea de una dinastía a quien le fue conferida por derecho divino la potestad sobre una nación.
Y a pesar de que los poderes de la Corona británica ya no son ni la sombra de lo que fueron, también es cierto que la casa de Windsor dista de ser una institución meramente simbólica. Después de todo, sus miembros pueden incurrir en toda índole de actos delictivos gozando de una robusta protección jurídica, pues no están sujetos a la ley civil.
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Además, tienen garantizada una lujosa subsistencia a costa de los contribuyentes ingleses, y están exentos de pagar impuestos de herencia. Esto por no mencionar que tienen la potestad de escoger nuevos ministros y estampar su rúbrica en cada ley británica que se promulga. Vamos, pueden revisar cualquier iniciativa de ley que comprometa su cuantioso patrimonio, antes de que dicha ley llegue al Parlamento.
Pero bueno, al menos la BBC tiene de cuando en cuando alguna fastuosa ceremonia que cubrir y comentar, consiguiendo altísimos niveles de audiencia y aprobación. Y la lectoría de la revista ¡Hola! dispone de alimento para el corazón.
datadura
Nombre de nacimiento: Thomas Pain (cambiado a Thomas Paine)
9 de febrero, 1737 – 8 de junio, 1809.
Ideología política: Liberalismo radical, republicanismo, humanismo secular.
Obras: Sentido común (1776), Los derechos del hombre (1791), La edad de la razón; siendo una investigación de teología cierta y fabulosa.