Corría el año 1998 y la editorial LOM presentaba como parte de su colección «Libros del ciudadano» un texto que muchos desconocíamos: «El Golpe», del tío Roberto Parra, que por ese tiempo ya era un nombre referencial en la cultura chilena con las décimas de la Negra Ester, el jazz huachaca y obviamente, las cuecas choras.
Las de LOM eran unas ediciones «económicas», pequeñas y ligeras, que recordaban en cierta forma las publicaciones de Quimantú durante la Unidad Popular. Por eso, muchos pudimos en su momento irlas comprando y coleccionando.
En mi caso, el libro del tío Roberto Parra fue uno de los que más me impactó. Era la primera vez que lo leía en extenso y me sorprendió la profundidad de su poesía, así como también su extraordinaria utilización del lenguaje, que en esta ocasión narraba el terrible acontecimiento del Golpe de Estado de 1973.
Por esos días (1998), la opinión pública chilena presenciaba la puesta en escena de la Derecha y la Concertación -con Pinochet sentado en el Senado- que en aras de la «reconciliación nacional», suprimían el feriado del 11 de septiembre e instauraban a cambio el «Día de la Unidad Nacional», que marcaba como feriado el primer lunes de septiembre, y que tuvo una efímera existencia.
En ese contexto, el escritor Manuel Silva Acevedo escribió en la presentación del libro del tío Roberto:
«Justo ahora que los señores políticos y los señores designados han suscrito el ‘histórico’ acuerdo de suprimir el feriado del 11 de septiembre, sale a la palestra don Roberto Parra con sus ácidas décimas y el más puntudo repertorio de la lira popular, dispuesto a impedir que la inveterada amnesia chilensis termine por borrar de nuestra memoria colectiva el trauma de aquella fecha luctuosa, con su larga secuela de crímenes y exacciones que horrorizan y avergüenzan».
«Nadie, que se sepa, en poesía o narrativa, había referido estos hechos con la crudeza y sentimiento que lo hace el ‘tío Roberto’, tanto que por momentos uno cree oír a su hermana Violeta. Con ‘El Golpe’, Roberto Parra permite el desahogo de un dolor popular que estaba pendiente y ofrece una reparación, aunque sea simbólica, a tantos chilenos y chilenas disconformes con las reconciliaciones ‘por arriba’, que pretenden suturar heridas sin antes haberlas descubierto y desinfectado», agregó Silva Acevedo.
Una descripción muy precisa del tono de «El Golpe», cuya décima inicial dice así:
Un relato de memoria
un once por la mañana
masacre máh inhumana
no ha registrado la historia
avioneh sin paz ni gloria
volaron a La Moneda
la desploman como greda
con bombah y metralleta
se pusieron máh jinetah
loh pacoh en la Moneda
A partir de aquí, el tío Roberto va narrando la evolución y la tragedia que significó el Golpe para el pueblo, mostrando una especial preocupación y sensibilidad hacia la represión que los militares desataron contra la población más pobre de Chile, una vez consumado su asalto al poder.
En la Nueva Matucana
hay operación peineta
están tocando retreta
a lah treh de la mañana
loh sacan desde lah camah
con lah lluviah torrencialeh
loh tratan como animaleh
a todoh loh pobladoreh
estoh caimaneh traidoreh
ratoneh de loh zorzaleh
(…)
En Bulnes y Santa Clara
hicieron zamba y canuta
mataron lah prostitutah
la cosa se pone rara
voy a meter la cuchara
como soy un poco huaso
a lo arriero cargo el lazo
hago trinar lah espuelah
voy a ver a mi chicuela
tará muerta de un balazo
A 50 años del Golpe, este texto de Roberto Parra es una obra fundamental para entender cómo se vivió desde el pueblo (y el bajo pueblo) el horror desatado por los militares. En sus décimas se intercalan historias de personas, familiares y amigos, además de testimoniar situaciones como el asesinato de Víctor Jara, las torturas en el Estadio Nacional y la Academia de Guerra, y varios otros crímenes.
Pero también, junto con lo anterior, la poesía del tío Roberto transmite constantemente un ansia de justicia, el afán de que algún día los generales traidores tuvieran que pagar por lo que hicieron, rindiendo cuentas ante el pueblo de Chile y la Historia.
Por AOM
Día del Folclor Urbano
Desde 2021, todos los 29 de junio se celebra en Chile el «Día del Folclor Urbano» en homenaje al natalicio de Roberto Parra Sandoval, uno de sus máximos referentes.
La fecha fue instaurada justo cuando se cumplieron 100 años de su nacimiento en Santiago de Chile.
Si quieres saber más sobre el tío Roberto Parra, te recomendamos la página Memoria Chilena.
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