Abusos sexuales, de conciencia y de poder, además de torturas, son algunos de los hechos denunciados por una ex alumna del Colegio Cumbres, perteneciente a la congregación religiosa Legionarios de Cristo.
Por estos hechos, la denunciante, actualmente de 32 años, presentó una demanda de indemnización por perjuicios en contra de la congregación, acción legal patrocinada por la Fundación para la Confianza.
En el texto judicial, presentado en junio de 2023, la mujer cuenta que estudió en el Colegio Cumbres Femenino entre 1996 y 2007, y después de participar en un club de niñas sobre educación, cultura y deportes (que reunía a los Legionarios de Cristo, a la Sociedad Vida Apostólica Consagradas del Regnum Christi y a la Sociedad de Vida Apostólica Laicos Consagrados del Regnum Christi), quiso conocer más a las Consagradas, un grupo de mujeres laicas que «ayudan» al discernimiento vocacional.
Luego de esto, afirma, y con solo 16 años de edad, fue duramente presionada y prácticamente obligada a ingresar al Centro Estudiantil, lo que implicaba vivir con estas mujeres, lo cual finalmente realizó entre 2008 y febrero de 2010, en una residencia ubicada en San Carlos de Apoquindo.
En ese contexto ocurrieron los abusos que denunció ante la Justicia, tanto por parte de las Consagradas del movimiento Regnum Christi, como de los sacerdotes de los Legionarios de Cristo.
La denuncia explica que el sistema de convivencia de las Consagradas implicaba que las alumnas no iban a clases, sino que las profesoras del colegio se acercaban a la casa donde residían todas. Es decir, se encontraban en un aislamiento total.
«En algunas ocasiones Heloísa (la asistente) me llevaba a sectores de la casa u otros lugares donde fui sometida a diversas vulneraciones de carácter sexual y físico grupales por parte de sacerdotes y seminaristas de la Congregación. Para lo anterior, utilizó distintas formas de sometimiento, como drogarme, amenazarme o dejarme sin comer para que estuviera más débil», se consigna en el escrito presentado ante la Justicia.
En la demanda están individualizados los sacerdotes de los Legionarios de Cristo, Alfredo Márquez, José Cárdenas, Juan Luis Cendejas, Luis Miguel Herrera, Daniel Reynolds y Pablo De Juan; y las Consagradas del Regnum Christi, Heloísa Cardin Santa Rosa y Araceli Delgado.
La ex alumna relata en su acción judicial que la vida dentro de dicha residencia «se basaba en la manipulación y en la anulación de la voluntad», acusando que durante esos años vivió abusos sexuales ejercidos en distintos grados y circunstancias, y que las autoridades de la Congregación, pese a tener conocimiento de los hechos, no obraron con la debida diligencia y cuidado, llegando incluso a encubrir los hechos.
Desde la Fundación para la Confianza, en tanto, agregaron que efectivamente, la víctima presentó en 2019 una denuncia canónica, tras lo cual se hicieron 2 investigaciones.
En la primera, concluida en abril de 2020, se determinó la verosimilitud de los hechos e indicios de que sacerdotes de la congregación habían participado en ellos.
Sin embargo, en la segunda, realizada entre octubre de 2020 y julio de 2021 por la Congregación para la Doctrina de la Fe, la denuncia fue cerrada por «falta de antecedentes».
«Nadie hizo nada para protegerme y evitar los abusos. Incluso, cuando traté de pedir ayuda, antes que los abusos se incrementaran, a la directora de las Consagradas, ésta decidió ignorarme y encubrir todo obligándome a guardar silencio de todo lo que estaba viviendo, siempre con superioridad y manipulación», se lee en la demanda, presentada en el Juzgado de Letras en lo Civil de Santiago.
Seguiremos informando.
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