Hoy domingo concluyó la cumbre por la paz para Ucrania realizada en Suiza. El evento que reunió a cerca de 60 líderes mundiales, no logró alcanzar unanimidad en relación a una declaración conjunta la cual reclama seguridad nuclear y tránsito marítimo.
Pese a que 80 países suscribieron dicha declaración, hubo un grupo de 13 países que se abstuvo y optaron por declinar firmar el documento.
La declaración, defiende que la central nuclear de Zaporiyia, debe funcionar bajo el completo control ucraniano. Además, solicitan seguridad para el tránsito de mercancías por el Mar Negro, detalló el medio Público.
El grupo de los 12
Dentro del grupo de los países que no firmó la declaración conjunta, se encuentran Brasil, India y Sudáfrica -que forman parte junto a Rusia y China del grupo de economías emergentes, conocidos como los BRICS-, además de México, informó EFE
Tampoco se unieron a la declaración final Armenia, Baréin, Indonesia, Eslovaquia, Libia, Arabia Saudí, Tailandia y Emiratos Árabes Unidos, mientras que 80 países sí suscribieron el documento, incluidos la gran mayoría de países de la Unión Europea, Estados Unidos, Japón, Chile y Ecuador.
La amenaza permanente de lo que podrís significar que este conflicto aumente de escala, es un temor constante en Europa y a raíz de aquello es que forman un bloque contra el país liderado por Vladimir Putin.
Mientras algunos aseguran que ambas partes tendrán que hacer concesiones, desde Kiev y Moscú es una opción que rechazan por el momento.
Declaraciones de Boric
En la cumbre, uno de los expositores fue el presidente Gabriel Boric, quien expresó ante los asistentes los motivos por los cuales estaba ahí.
«Queridos jefes de Estado, ¿por qué un país tan lejano a esta guerra, como Chile, está participando en esta cumbre? No es porque no nos guste Putin, quien personalmente no me gusta, o porque tengamos simpatía por el señor Zelenski. No es porque apoyemos la ampliación de la OTAN hacia el este, o porque seamos parte de uno u otro bloque geopolítico. Es porque nosotros, como un pequeño país en el sur del mundo, con nuestros 20 millones de habitantes, somos conscientes de que solo el respeto a la ley internacional y a los derechos humanos puede garantizar la paz», señaló.