El 8 de noviembre de 2012, como parte de la Nación Mapuche Expresamos lo siguiente:
Primero, se cumplen 10 años del asesinato de nuestro Weichafe Alex Lemun, 10 años desde que este joven Weichafe dejó de caminar por esta tierra para elevarse y reunirse con nuestro Kuifikecheyen. Tenemos la convicción de que fue recibido con grandes honores. Simplemente porque con Witruwe en mano luchó para defender a su gente, nosotros el Pueblo de la Nación Mapuche.
Segundo. El asesino no está impune, porque su impunidad no existe en nuestras conciencias. Marco Aurelio Truere Pako perro guardián del Capital, nuestro pueblo nunca olvidará tu nombre, donde estemos te vamos a funar y para ti solo tenemos Weichan. Lo mismo para Patricio Jara Muñoz y Walter Ramírez Inostroza, asesinos de nuestros Weichafe Jaime Mendoza Collio y Matías Catrileo. Nunca más podrán caminar tranquilos.
Tercero. Hoy día tenemos la convicción que desde la otra Mapu, él nos está queriendo, amando y protegiendo. Sabemos muy bien que su newen sigue vivo en cada uno de nosotros y que sigue despertando a los Weichafes en todo el territorio. Para nosotros la muerte de nuestros Weichafes se transforma en vida, y además en un verdadero ejemplo de Dignidad.
Finalmente Lamngen ñaña que todo el sufrimiento, la pena, el dolor y la rabia, que nos han hecho padecer, que esta tarde se transforme en justicia Mapuche, por él, por nuestra gente y por los que vienen.
SI UNO CAE DIEZ SE LEVANTAN!!
AMULEPE TAIÑ WEICHAN!!!
MARICHIWEU!!! MARICHIWEU!!!!
AUTOCONVOCATORIA MAPUCHE EN SANTIAGO
LA MARCHA EN SANTIAGO
Antes del inicio de la marcha, comenzó la rutina que se ha hecho habitual de parte de Carabineros, que empezaron a revisar las mochilas e incluso hasta los bolsillos de los muchachos presentes, supervisados por el subteniente D. Rivera B. De pronto, se escuchó una detonación y se desplegó un operativo con alta cantidad de uniformados armados hasta los dientes, apareció toda la parafernalia: corte de tránsito en Alameda con Arturo Prat y llegada del Gope. Al poco rato los expertos determinaron que solo fue una bomba de ruido similar a los petardos y no se justificaba mantener ese despliegue de fuerzas.
La marcha comenzó su recorrido en forma pacífica, hasta que en la oscuridad de la calle Huérfanos estaban los invitados de piedra, que comenzaron a reprimir a los que se manifestaban. Estos operativos, lejos de mantener el orden en las marchas, se convierten en una provocación que altera los ánimos de la gente, que solo busca ser escuchada por las autoridades cuando clama esa justicia que nunca llega, para los que no tienen poder económico para exigirla. Aún no se logra que haya igualdad ante la ley y se castigue a los culpables de crímenes, prevaleciendo la impunidad.
Fuente: Trinchera de la Imagen