Estados Unidos desplegará de forma constante y rutinaria sus activos estratégicos en la península de Corea, anunció el 26 de abril el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, quien se encuentra de visita oficial en Washington.
Los mandatarios de Estados Unidos y Corea del Sur reforzaron su discurso en contra de Corea del Norte tras varios meses de ejercicios militares, tanto de Seúl como de Pyongyang.
«Un ataque nuclear de Corea del Norte contra Estados Unidos o sus aliados supondrá el fin de cualquier régimen que realice tal acción», declaró Biden durante una rueda de prensa conjunta con su par surcoreano.
Sin embargo, el mandatario estadounidense subrayó que la Nueva Declaración de Washington —firmada en el encuentro— no estipula el despliegue de armas nucleares estadounidenses en la península de Corea.
No obstante, ambas partes reconocieron que el acuerdo bilateral alcanzado sí establece que Estados Unidos despliegue activos estratégicos en la península. De hecho, en la declaración se afirma que, entre los primeros pasos que dará el Pentágono, se encuentra la visita de un submarino balístico nuclear estadounidense a Corea del Sur, algo que no ha ocurrido desde principios de la década de 1980.
«En virtud de la declaración conjunta, Estados Unidos también aumentará la visibilidad de sus activos estratégicos en la región, incluida la próxima visita de un submarino balístico nuclear a Corea del Sur», detalla el comunicado difundido por el Departamento de Defensa estadounidense.
«[Corea del Sur] confía plenamente en los compromisos de disuasión ampliada de Estados Unidos y reconoce la importancia, la necesidad y las ventajas de su dependencia permanente de la disuasión nuclear estadounidense», se lee en la declaración.
Por su parte, la Casa Blanca subrayó que ambos países llegaron a acuerdos que determinan «una visión compartida de una fuerte alianza entre Estados Unidos y la República de Corea, que mantiene la paz, la estabilidad y la prosperidad en el Indo-Pacífico y más allá».
Horas más tarde, la Casa Blanca aclaró que Washington se compromete a consultar con Seúl, en todo momento, para poder desplegar sus armas nucleares en la península de Corea.
«EEUU se compromete a hacer todo lo posible para consultar con la República de Corea [Corea del Sur] cualquier posible empleo de armas nucleares en la península de Corea, de conformidad con la política declaratoria de la Revisión de la Postura Nuclear estadounidense y la alianza mantendrá una sólida infraestructura de comunicación para facilitar estas consultas», señaló.
Fuente Sputnik
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