Amnistía Internacional: “no existe un plan de reparación integral que cumpla con los estándares internacionales de derechos humanos”
Amnistía Internacional y el Núcleo Interdisciplinario de Derechos Humanos presentarán este miércoles 31 de mayo el informe “Reparación integral de las violaciones de derechos humanos cometidas en el contexto del estallido social” ante víctimas de la represión policial y organizaciones de la sociedad civil.
El informe concluye que a tres años y medio de las masivas protestas de 2019, en Chile se han implementado algunos programas de apoyo, pero no existe un plan de reparación integral que cumpla con los estándares internacionales de derechos humanos.
“Lamentablemente las víctimas de la brutalidad policial y militar siguen estando muy solas intentando rearmar sus vidas tras los abusos que sufrieron y, por otra parte, la sociedad en su conjunto aún no cuenta con garantías de no repetición que asegure que hechos tan crueles como los ocurridos en el marco del estallido social no vuelvan a ocurrir”, menciona Rodrigo Bustos, director ejecutivo de Amnistía Internacional Chile.
“La reparación es un derecho de las víctimas y el Estado tiene el deber correlativo de reparar. Así lo han consagrado los principales tratados internacionales de derechos humanos. Lamentablemente la respuesta de Chile en esta materia no ha sido suficiente”, añade Pietro Sferrazza, investigador del Núcleo Interdisciplinario de Derechos Humanos.
El informe detalla las implicancias de la reparación desde una perspectiva de derechos humanos y entrega recomendaciones a las autoridades para que Chile avance hacia una reparación plena y efectiva considerando las siguientes modalidades: restitución, indemnización, rehabilitación, satisfacción y garantías de no repetición. Por cierto, aunque el Estado, en paralelo, tiene el deber de investigar, juzgar y sancionar a todos los responsables de violaciones de derechos humanos, la Corte Interamericana de Derechos Humanos considera que estos puntos también constituyen medidas de reparación.
El informe ha sido enviado con antelación a las autoridades de Gobierno, por lo que se espera que las recomendaciones sean consideradas en los programas de reparación y el Presidente Gabriel Boric reafirme su compromiso en la Cuenta Pública sobre este tema y dé a conocer de manera precisa cómo su administración alineará los planes vigentes de reparación a los estándares internacionales de derechos humanos.
Información complementaria:
A continuación se explican brevemente los conceptos: restitución, indemnización, rehabilitación, satisfacción y garantías de no repetición que deben considerarse al momento de generar un programa de reparación integral y participativo con las víctimas:
La restitución implica el restablecimiento de la situación que existía antes de que ocurriera la violación a los derechos humanos de la víctima, siempre que esto sea posible.
La rehabilitación comprende medidas destinadas a brindar atención médica, psicológica y social a las víctimas.
La indemnización consiste en el pago de una suma de dinero para compensar todo daño económicamente evaluable ocasionado a las víctimas. La indemnización comprende tanto el daño material o patrimonial, como también el menoscabo inmaterial o moral.
Las medidas de satisfacción apuntan al reconocimiento de la dignidad de la víctima y protagonizan la dimensión simbólica de la reparación. Tienen por objeto despertar la conciencia pública para evitar la repetición de los hechos y conservar viva la memoria en honor a las víctimas.
Las garantías de no repetición son medidas que pretenden evitar la reiteración de las violaciones a los derechos humanos. Tienen un alcance y repercusión a nivel comunitario y en muchas ocasiones resuelven problemas estructurales, beneficiando no sólo a las víctimas, sino también a otros grupos de la sociedad.