Según dio a conocer Andrés Gómez-Lobo, ministro de Transportes y Telecomunicaciones, junto a Guillermo Muñoz, director de Transporte Público Metropolitano, el horario del saldo de emergencia será extensible a los siguientes horarios:
Lunes a Sábado entre las 21 horas y las 11 de la mañana
Domingos y festivos entre las 14 horas y las 11 de la mañana.
Lo que persigue esta iniciativa es que quienes no tengan la posibilidad de recargar la tarjeta, puedan pagar igualmente su pasaje, antes que cometer evasión. El saldo que quede pendiente será autocancelado en la siguiente recarga de la tarjeta.
El director de Transporte Público Metropolitano, Guillermo Muñoz, señaló que incluso se está evaluando la posibilidad de que este “beneficio” se pueda extender durante todo el día.
Sin embargo ante la pregunta de si el valor del pasaje podría presentar alguna disminución ya que el precio de los combustibles han bajado, su respuesta fue que no.
Es un poco alarmante que se resistan a bajar la tarifa de la locomoción, considerando que el combustible ha bajado de forma considerable el último tiempo. A esto hay que sumar el hecho de que los combustibles tienen el 19% del IVA, además del impuesto específico que se agregó en el año 1985 a razón de las malas condiciones en que quedaron los caminos y carreteras luego del terremoto. Sin embargo, luego del retorno a la democracia, ningún gobierno ha sido capaz de levantar esos impuestos injustificados y más aún si tomamos en cuenta de que hoy en día, los caminos y carreteras se encuentran concesionados. Eso quiere decir que nos cobran una millonada por el TAG, cuyos precios son ridículos de caros y se supone que ese dinero es para que las empresas concesionarias paguen los costos de mantención de esos caminos y carreteras. Entonces, si se quita el impuesto específico a los combustibles (que debiera ser lo obvio, porque más encima la gente que tiene autos debe pagar el IVA y los TAG) y tomamos en consideración la baja en los costos del combustible a nivel mundial, ya es hora de que dejen de castigarnos con las tarifas y que transantiago baje el valor de sus pasajes, que son una vergüenza nacional. Sobre todo considerando la calidad del servicio, que además es pésimo.
En Twitter: @AngelaBarraza