El proyecto de ley para reformar Carabineros de Chile fue ingresado al Congreso seis días después del asesinato de Camilo Catrillanca, en noviembre de 2018 tras un operativo del denominado “Comando Jungla”.
Dos días atrás, el Instituto Nacional de Derechos Humanos celebró que la Corte Suprema rechazó el recurso de nulidad presentado por dos ex carabineros condenados por el asesinato del comunero mapuche. Sergio Micco aseguró que “este fallo viene a confirmar la necesidad urgente de una reforma de Carabineros. Por el bien de la propia institución y por el bien del país.”
A solo días de que el exjuez Baltasar Garzón introdujera ante la Corte Penal Internacional una denuncia contra Sebastián Piñera por crímenes de lesa humanidad durante el estallido social y que el Fiscal Nacional Jorge Abbott ordenó revisar todas las causas archivadas por violaciones a los derechos humanos, y a un mes de que comience el juicio por el fraude de Carabineros -el denominado “Pacogate”-, la institución anunció uno de los cambios que pretenden implementar en el corto plazo.
El jefe de la Dirección de Operaciones Policiales, general Enrique Bassaletti, informó que Carabineros va a cambiar de uniforme.
“Estamos recién en la primera etapa de este proyecto, por lo que para el próximo año ya deberíamos tener todo listo. Además, también se tienen que respetar los procesos disponibles para compras públicas, dado que son tenidas para más de 50 mil funcionarios”, explicó el general Bassaletti.
Según Bassaletti el cambio de uniforme se da en el marco de un proceso de modernización, «donde habrá modificaciones estructurales por supuesto, pero que también requiere de una nueva imagen, que proyecte una policía más visible”.
«Buscamos tener una tela tipo polera, con cierre, y que tenga protección de los rayos ultravioleta, con sistema de ventilación y tiras reflectante. Esto es muy útil al momento de hacer prevención. Ahora, es importante señalar que sí, tendremos una nueva cara, con un vestuario más acorde a las necesidades del personal, pero mantendremos el verde. Esa es nuestra esencia”, acotó.
La institución recién comienza a levantarse de la última caída que tuvo en la encuesta CEP del 2020. En esa ocasión, Carabineros marcó un 17% de confianza. Además, un 88% de los encuestados afirmó que existieron violaciones a los derechos humanos durante la revuelta social y un 81% se mostró en contra del uso de balines y perdigones.
Los juicios a los presos de la revuelta han revelado la existencia de grupos de funcionarios de Carabineros de civil encargados de seguir a manifestantes que pusieron en alerta a parte de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados.
Por otro lado, la reactivación de causas antiguas, tanto de derechos humanos como sobre el desfalco más grande en la historia del país, podrían arrastrar a Carabineros a los puestos más bajos de aprobación nuevamente.
Este año, Carabineros logró subir a un 30% de aprobación en la CEP, aunque sigue estando muy por debajo del panorama de la institución de hace cinco años.
Mientras tanto, el proyecto de su reforma está en la Comisión Mixta desde el 19 de enero por el rechazo en el Senado de las modificaciones agregadas en la Cámara de Diputados.