La parcela 30, loteada en 34 sitios para desarrollar el Proyecto Mirador Piedra del Trueno, tiene un alto valor arqueológico, geológico y sobre la biodiversidad del territorio, razón por la que un importante movimiento lo defiende y que ha sido víctima de represión.
Organizaciones, comunidades y personas pertenecientes a los pueblos originarios de las regiones de Valparaíso y de O’higgins, salieron al paso ante este atentatorio proyecto.
“El espacio en cuestión, en conjunto con la península y la playa de Punta de Tralka, las playas de Tabulanque o Taulaque, y los acantilados de Cantalao, conforman un sitio de enorme importancia histórica y cultural para nosotros, en tanto entendemos que se trata de un antiguo espacio de encuentro y de espiritualidad, se trata de un sitio ceremonial ancestral, que sigue siendo ocupado cotidianamente por nuestros pueblos”
Compartimos declaración pública
Declaración Pública de Organizaciones de Pueblos Originarios por la defensa de Punta de Tralka – Challa Malal.
Tralka Lafken Mapu 14 de septiembre de 2022
Las organizaciones y personas que suscriben, pertenecientes a los pueblos originarios de las regiones de Valparaíso y de O’higgins, ante los hechos acaecidos en Punta de Tralka, donde los vecinos se encuentran defendiendo de la voracidad inmobiliaria el predio de la ex parcela 30, espacio llamado también Cantalao y Challa Malal, venimos a declarar lo siguiente:
El espacio en cuestión, en conjunto con la península y la playa de Punta de Tralka, las playas de Tabulanque o Taulaque, y los acantilados de Cantalao, conforman un sitio de enorme importancia histórica y cultural para nosotros, en tanto entendemos que se trata de un antiguo espacio de encuentro y de espiritualidad, se trata de un sitio ceremonial ancestral, que sigue siendo ocupado cotidianamente por nuestros pueblos, resguardando el invaluable patrimonio biocultural, compuesto por patrimonio arqueológico, hitos geoculturales de alto valor paisajístico, diversidad de especies de animales y plantas, pero por sobre todo, manteniendo allí nuestras prácticas espirituales y culturales, realizando ceremonias, ofrendas, recolectando l’awen’ (medicina) y alimentos, lo que en suma significa mantener, redescubrir y revalorar nuestra conexión con los ngen’ mapu o newen que coexisten con nosotros, sosteniendo la vida y la salud del territorio.
Recordando además que el Estado de Chile ha reconocido al pueblo chango como un pueblo vivo, cuyo hábitat es el borde costero, tal como dice la ley…
«Son changos las comunidades costeras ubicadas principalmente desde la II a la V Región. Se procurará proteger especialmente el hábitat de este pueblo originario, constituido por el borde costero, playas, islas y roqueríos, como asimismo la biodiversidad y ecosistemas marinos que garantizan su desarrollo y supervivencia» .
Es notoriamente evidente que dicho hábitat de nuestro pueblo se encuentra sumamente intervenido por el desarrollo inmobiliario y la infraestructura urbana y turística, siendo cada vez más escasos los espacios libres de intervención.
Es por ello que lugares como Punta de Tralka y sus alrededores son redobladamente importantes e imprescindibles para nuestra vida, y para la de todas/os las/los habitantes del litoral.
Como pueblos originarios, exigimos a las autoridades comunales y regionales, tomar todas las medidas posibles para evitar nuevas intervenciones en este espacio, y buscar un camino que nos permita llegar a la protección definitiva de Punta de Tralka y todo su entorno. Apoyamos la creación de un Santuario de la Naturaleza, en el que se respeten los usos ancestrales del espacio, tal como lo han estado solicitando los vecinos organizados.
Repudiamos la acción vacilante y engañosa de las autoridades y funcionarios municipales, que ha entrampado el compromiso de avanzar hacia el cambio de uso de suelo de la ex parcela 30, como una necesaria y urgente medida de protección. Repudiamos también la negligencia y la grave omisión de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena CONADI, la que, habiendo sido interpelada reiteradamente por nuestras comunidades, se ha desentendido de ésta y otras situaciones graves que están afectando a nuestra gente.
Por supuesto que repudiamos también las acciones y actitudes matonescas de la empresa inmobiliaria Grupo Feria, en su afán por instalar su inviable proyecto en Challa Malal. Les reiteramos que ese proyecto, y cualquier otro que implique la privatización del espacio, es absolutamente inviable, ambiental y culturalmente, y que como pueblos originarios, sumaremos nuestras fuerzas en la defensa de este sitio de alto valor biocultural. No permitiremos que se siga destruyendo ni enajenándosenos nuestro territorio. El negocio inmobiliario lucra con bienes que deben ser comunes, mientras que los pueblos chango y mapuche llevamos siglos conviviendo en armonía con todos los seres que nos rodean.
Empresas Inmobiliarias, ¡Fuera del borde costero y las quebradas!
Comunidad Chango L’afken’che Tralka L’afken’ Asociación Mapuche Newen Trawün Comunidad Changos del Éxodo
Comunidad Changos del Carcajal
Comunidad Changa Maritorio del Chorrilo, Topocalma, Pichilemu, Cáhuil y Bucalemu Changos de Caleta Boca del Maipo
Comunidad Diaguita Campillay Guacalagasta Asamblea de Pueblos Originarios de la V Región Asociación Indígena Calaucán
Asociación Red de Emprendedores Indígenas de la provincia de San Antonio.