Contraloría detectó irregularidades en la ejecución de $141 millones destinados a programa para víctimas de trauma ocular

Las deficiencias y carencias presentadas por el programa desde su creación en noviembre de 2019, ya habían sido denunciadas reiteradas veces por la Coordinadora de Víctimas de Trauma Ocular. El Hospital El Salvador tendrá 60 días de plazo para dar respuesta a las indicaciones señaladas en el informe de la Contraloría.

Contraloría detectó irregularidades en la ejecución de $141 millones destinados a programa para víctimas de trauma ocular

Autor: Javiera Torres

Fotografía rescatada de Piensa Chile

La Contraloría General de la República realizó una auditoría al Programa Integral de Reparación Ocular (PIRO) del Hospital El Salvador, tras dos oficios parlamentarios presentados en abril pasado por la diputada Gael Yeomans, junto a los diputados Gonzalo Winter, Diego Ibáñez y Gabriel Boric; que alertaban sobre presuntas irregularidades al interior del programa.

Lo que hizo el organismo fiscalizador fue inspeccionar si el recinto asistencial había ejecutado o no las medidas de monitoreo y control de los recursos asignados al programa entre el 18 de octubre de 2019 y el 31 de marzo de 2021. En relación a esto los fondos que recibe el PIRO a través del Servicio de Salud Metropolitano Oriente (SSMO), provienen del Fondo Nacional de Salud (FONASA).

Sucede que en relación a los $718 millones asignados al programa para el año 2020, “los gastos efectuados con cargo a dicho programa, entre los años 2019 y 2020, habrían ascendido a $576.839.768, lo que implica la existencia de un saldo de 141.429.232, al 31 de diciembre de 2020, respecto del cual no se obtuvo información sobre su utilización”, sostuvo en su informe la Contraloría.

En otras palabras, se concluyó que existía una “deficiencia en la trazabilidad de remesas y gastos” del programa, tras revisar los documentos relativos a los ingresos en los cuales los fondos destinados al PIRO aparecían en la categoría de “finalidades generales”. Careciendo de un desglose específico sobre la ejecución de dichos dineros.

Asimismo, la Contraloría observó que al momento en que los pacientes ingresaban al programa no se dejaba constancia de si se trataba o no de una víctima de lesión ocular producto de las violaciones sistemáticas ocurridas durante el estallido social. Por lo que esta omisión impedía “determinar cuáles pacientes de trauma ocular que son atendidos en la respectiva unidad del Hospital del Salvador corresponden a las personas beneficiadas del PIRO”, se señala en el informe.

Por último, se constató que, de los 93 usuarios/as que se atendían en el programa, en ocho casos “el historial clínico de los pacientes no contiene antecedentes que acrediten las atenciones prestadas en virtud del programa PIRO”.

Sobre los resultados de la auditoría, la integrante de la Coordinadora de Víctimas de Trauma Ocular, Marta Valdés, manifestó en conversación con Radio Bíobío: “Nosotros hace tiempo que veníamos denunciando estas irregularidades. Nuestras sospechas finalmente tenían asidero, efectivamente los recursos no se estaban ocupando todos en el programa (…) Por eso también nuestros compañeros se veían perjudicados con el cambio de prótesis, con el tema de las atenciones, con los problemas que teníamos de infraestructura, señalética y todo eso que también muchas veces planteamos”.

El Hospital El Salvador tendrá 60 días hábiles desde la emisión del informe de Contraloría para preparar una respuesta en la que se dé cuenta de cómo fueron gastados los fondos destinados al PIRO y en la que se acredite que las atenciones prestadas en virtud del programa hayan sido debidamente registradas en las fichas médicas de los pacientes.


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano