En libertad quedó este martes el otrora funcionario de seguridad municipal de La Florida, en la región Metropolitana, que el sábado pasado fue sorprendido dejando un artefacto explosivo en plena vía pública el pasado viernes.
Tras ser formalizado, el ciudadano venezolano de 51 años e identificado con las iniciales O.L.M., quedó solo con las cautelares de arraigo nacional y firma mensual.
Cabe recordar que el el hombre declaró haber visto a un sujeto abandonado el artefacto, una granada tipo mortero, en la intersección de avenida Perú con John Kennedy. Carabineros acudió al lugar y confirmó la existencia de un artefacto explosivo tipo BDU-33, de 10 kilos, utilizado para simular lanzamientos de bombas reales.
Como medida de precaución, vecinos y locatarios del sector fueron evacuados mientras el Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPE) llevaba a cabo el procedimiento.
Sin embargo, durante la revisión de las cámaras de seguridad, los policías descubrieron que la bomba había sido colocada en el lugar por el mismo funcionario municipal. Las grabaciones mostraron como se bajó de una motocicleta y abandonó el elemento en el sitio.
Durante la audiencia de formalización celebrada este martes, el fiscal Alejandro Sepúlveda, de la Fiscalía Metropolitana Oriente, relató los hechos antes de la imputación de cargos por los delitos de porte de munición de guerra y desórdenes públicos. Todo, durante el procedimiento en el 14° Juzgado de Garantía de Santiago:
“Portó y transportó, a bordo de una motocicleta, por la comuna de La Florida, una bomba de aviación para práctica, comúnmente usada por la Aviación, llegando a la intersección de John Kennedy con avenida Perú; lugar en que deja dicho artefacto en el suelo, tapado por una bolsa, siendo descubierto a través del registro de cámaras existente en el lugar, perturbando gravemente la tranquilidad pública con la conmoción y movilización de recursos estatales que debieron concurrir al lugar para verificar la situación y aislamiento del lugar, y el resguardo de la integridad de las personas que circulaban por dicho recinto”.
La bomba era una BDU 33, la cual es usada para el entrenamiento militar, cuyo peso es de aproximadamente 10 kilos y es empleada para simular lanzamientos de bombas reales. Estas características incidieron en generar dudas sobre el relato que el funcionario entregó a Carabineros cuando fue descubierto.
Solicitan arraigo nacional y firma mensual
Finalmente, E O.L.M. fue formalizado por los delitos de porte o tenencia de municiones de guerra y desórdenes públicos por parte de la Fiscalía Oriente. A lo que se sumó una querella por parte de la Delegación Presidencial Metropolitana, por lo que se solicitó al tribunal arraigo nacional y firma mensual.
Sobre esta medida cautelar, la jueza Karen Atala, quien presidió la audiencia, recordó que la función del patrullero de seguridad ciudadana es resguardar el orden público.
No obstante, explicó que el techo sobre el cual puede pronunciarse es con base en las cautelares que hace el Ministerio Público, para no cometer el delito de extrapetita o plurispetita.
Desde Fiscalía aseguraron que el artefacto abandonado por el exfuncionario se trataba de una bomba en desuso que no tenía capacidad para explotar, lo cual fue constatado tras las pericias realizadas por los especialistas de la policía.
Por tal motivo, a petición de la Defensoría Penal Pública, la audiencia de sobreseimiento del expatrullero quedó fijada para el próximo 15 de septiembre.
Desde la Municipalidad de La Florida confirmaron que O.L.M, fue desvinculado de sus funciones la misma noche en que ocurrieron los hechos.
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