Este miércoles fue rechazada en la Cámara de Diputados la reforma tributaria impulsada por el gobierno de Gabriel Boric, un proyecto que desde el mismo Ejecutivo habían recalcado que era clave para poder avanzar en la ampliación de derechos sociales para la ciudadanía.
Tras la votación, el ministro de Hacienda Mario Marcel dio un punto de prensa para referirse a lo ocurrido hoy en el Congreso, donde faltaron dos votos para aprobar la medida que buscaba aumentar la recaudación fiscal.
Con un tono de evidente molestia, el secretario de Estado calificó de «una derrota para el país» el rechazo a la reforma previsional, y aseguró que los únicos que tienen razones para celebrar son los elusores de impuestos y quienes los asesoran.
«Esta votación es una mala noticia para los pensionados. Esto significa que en estos momentos el aumento de la PGU a $250.000 no tiene financiamiento. Es una mala noticia para las mujeres en el Día Internacional de la Mujer. Explicamos que esta es una reforma tributaria que beneficiaba a las mujeres, que gravaba particularmente a los hombres de altos ingresos y altos patrimonio y que, además, financiaba acciones del Estado en beneficio de esas mujeres. Particularmente, a través de la PGU y del sistema de cuidados», agregó Marcel.
Marcel también aseguró que el rechazo de la reforma tributaria es una mala noticia para la clase media, «porque los créditos tributarios en favor de los arriendos y de los gastos en cuidado, ya no van a existir. En las próximas declaraciones de renta no va a haber ese casillero con el cual podían descontarse esos gastos«.
Finalmente, el jefe de la billetera fiscal aseguró que la votación de hoy «es una mala noticia para la política, porque lo que hemos tenido en esta votación es que la ideología se impuso sobre el pragmatismo. La ideología se impuso sobre el diálogo». añadió.
Un largo debate
Cabe recordar que el proceso de tramitación de la reforma tributaria comenzó a inicios del gobierno del presidente Boric con un proceso de diálogo abierto con la ciudadanía, empresas y organizaciones de la sociedad civil. Además, según recalcó Marcel, el Ejecutivo presentó cerca de 90 indicaciones durante los ocho meses que duró la discusión.
El rechazo a la reforma tributaria implica también que no podrá volver a legislarse sobre esta materia hasta un año más, por lo que quedaría en vilo gran parte de la aplicación del programa de Gobierno.
«Estoy seguro de que van a celebrar quienes evaden impuestos y quienes asesoran a los contribuyentes para evadir impuestos, porque van a tener por lo menos un año completo más para poder seguir usando los mismos mecanismos de elución tributaria», declaró Marcel.
«La ideología se impuso sobre el pragmatismo, se impuso sobre el diálogo», sentenció el ministro de Hacienda