Concertación busca rearmar lo que se le rompió

Todo estaba preparado, tarde o temprano y fruto del binominal y su natural alternancia, la derecha se sentaría en La Moneda. La Concertación -que nunca fue izquierda, tras su pecado original- trataría, en parte, de recordar sus orígenes, este pasado Primero de Mayo saliendo a las calles al acto de la CUT en el Día Internacional del Trabajador(a).

Serían abucheados y malvenidos por muchos de los asistentes a la manifestación callejera, Tohá y Rossi, la pareja de la teleserie concertacionista. Ella, la pre anunciada candidata presidencial del bloque disminuido, la misma a la que le lanzaron monedas, una Bachelet 2.0.

Dicen que “quieren recomponer lazos con el tejido social”, el mismo que se encargaron de dividir, endeudar y atomizar, con su comunión irrestricta a un modelo económico depredador de la naturaleza y el ser humano, creando un país de “bajo riesgo” para el dinero del capitalismo transnacional.

No obstante, podemos decir, y con orgullo, que en el trabajo de auto articulación, desde la base de nuestra sociedad, en la que nos reconocemos como pueblos diversos, hastiados del atropello y el abuso de poder, y que buscamos transformaciones sociales de fondo, las discusiones avanzan con grados de autonomía, paso a paso.

Y es que fruto de una renovada vanguardia popular, en la que participan artistas, estudiantes, obreros, dueñas de casa y tantos otros(as) de este variopinto país, nos vamos uniendo hace tiempo atrás, sin firmar fichas ni documentos, en una fuerza de incalculable potencial que, sin ser partido en Chile, es parte de una gran ola internacional y profundamente latinoamericana, que crece con la semilla llevada por el viento:  El movimiento de los pueblos. No hay ejemplo cercano más claro que las más de 30 mil personas que acudieron a la Conferencia Mundial de Los Pueblos sobre el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra.

En esta presente edición entregamos a usted las discusiones ocurridas en el marco del llamado hecho por el presidente Evo Morales, en Cochabamba, Bolivia. Espacio de ciudadanía en que los pueblos reunidos se fijan un horizonte claro que ponga atajo al modelo neoliberal depredador de la Ñuke Mapu, la Madre Tierra, y de nuestra especie.

Junto a ello y de portada, un tema de suma importancia, debate de fondo que ha sido -a nuestro parecer- evitado por las mansiones comunicacionales de prensa y TV nacional, que tiene que ver con la vacuna para combatir el virus conocido como AH1N1, el que aún no se explica cómo se traspasó del cerdo al humano, y que se activa con las bajas temperaturas. El contagio fue declarado “pandemia” por la OMS, en medio de duras controversias por los lazos de ésta con los laboratorios que comercializaban el  “antígeno”.

Investigamos sobre los graves riesgos y contraindicaciones de la vacuna que no han sido correctamente informados por la prensa ni los organismos de salud, así como los conflictos de intereses de los médicos asesores del Ministerio de Salud, para esta vacuna en particular, y los laboratorios que la fabrican y comercializan.

Y por supuesto, no podía faltar, sepa usted más acerca de quién está detrás de la sonrisa que gobierna, qué parte de su fortuna declaró Sebastián Piñera, y participe de un entretenido juego donde si sus habilidades y memoria no fallan, podrá desenmascarar los vínculos, orígenes y cruces de intereses de los que viven a costillas nuestras.

Editorial publicada en la edición N°80, mayo 2010, de El Ciudadano

El Ciudadano