Tras los resultados del Plebiscito de Salida, en donde se impuso el rechazo a la propuesta de la nueva Carta Magna, redactada por la Convención Constitucional, es preciso analizar el efecto de la campaña de desinformación emprendida por la derecha y el papel que jugaron los medios de comunicación, al servicio de las élites y las grandes empresas.
Tal y como señaló El Ciudadano en su editorial «Operación Rechazo: Un atentado contra el proyecto constitucional más avanzado del mundo«, con extraordinarias cantidades de dinero, la operación rechazo se desplegó por medio de redes sociales, para difundir noticias falsas sobre la propuesta de la nueva Constitución, con el fin de crear confusión en el conjunto de la población.
Asimismo, las grandes corporaciones que controlan la big data recibieron gigantes suma para influir en las opiniones y decisiones de millones de personas a las que llegaban con mensajes precisos, en materias que no han sido dimensionadas en Chile, pero que ya cuentan con precedentes conocidos en otros países.
Esta operación de inteligencia, cuyo fin fue derrotar el proyecto constitucional, se basó en generar miedo y confusión en la ciudadanía y buena parte de su éxito se debió a la falta de pluralismo mediático en el país.
«Hubo una campaña de desinformación y de miedo, pero también la hubo en las elecciones anteriores. Carecemos de pluralismo mediático, algo que nunca pareció incomodar a los políticos progresistas. El fracaso es demasiado contundente como para no hacer una autocrítica», señaló el periodista y escritor Óscar Contardo.
«Creo que para la gran mayoría la propuesta significó «incertidumbre» y no «esperanza», algo que el Rechazo supo identificar. No propusieron nada, pero el temor y la incertidumbre eran suficientes para convocar a una población exhausta que necesita certidumbre», indicó en una serie de mensajes publicado en su cuenta en Twitter.
Desequilibrio y falta de pluralismo informativo
Cabe recordar que durante la campaña electoral, diversas organizaciones sociales expresaron preocupación por el rol de los medios de comunicación frente al Plebiscito.
«Resulta evidente el desequilibrio en la calidad de la información proporcionada en este período, especialmente a través de la televisión abierta, pero también en la prensa escrita y la radio», alertaron a finales de agosto desde la Comisión Chilena de Derechos Humanos y un grupo de organizaciones.
A través de una declaración pública plantearon que el pluralismo informativo «se encuentra seriamente debilitado en Chile como consecuencia de una enorme y creciente concentración de la propiedad de los medios de comunicación social».
En el texto plantearon que en ocasión del plebiscito constitucional, esta crisis se agudizó, «mediante la utilización sistemática de prácticas de desinformación, todas las cuales han perjudicado gravemente el desarrollo de un auténtico debate público que permita a la ciudadanía manifestar con propiedad su preferencia en esta materia, de vital importancia para el conjunto de la sociedad chilena».
«Las denominadas fake news, la información sesgada y engañosa y la mera propaganda son utilizadas por quienes los grandes medios les dan tribuna permanentemente, particularmente en los grandes medios de comunicación masiva, como los canales de televisión», indicaron.
La Comisión y las organizaciones se refirieron al caso concreto de la televisión abierta , y alertaron que las emisoras no se preocuparon por promover adecuada información sobre los contenidos de la propuesta constitucional.
«Claramente, la televisión instaló un modelo de aparente debate que impidió el real conocimiento de la propuesta, centrándose en aspectos adjetivos y de espectacularidad», explicaron.
«Por otra parte, resulta insólito que el único concesionario que presentaba una mirada diversa al enfoque monocorde de contenidos, permanece en una crisis operacional hace meses, respecto de la cual ninguna autoridad pública, ni sus propios directivos se han manifestado», destacaron.
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Propaganda en redes a favor del rechazo
Un reportaje publicado por Radio Biobío dio cuenta de que siete páginas de Facebook habían utilizado más de 10 millones de pesos para pagar publicidad a favor del Rechazo. De las diez páginas que más recursos han invertido en publicidad durante la campaña, ninguna está por el Apruebo.
Al mismo tiempo, un estudio realizado por la consultora LLYC arrojó que los usuarios de Twitter que estaban por el Rechazo generaban 20.000 mensajes más que los que estaban por el Apruebo. En una línea similar, los adherentes al Apruebo en Twitter alcanzaban un número bastante inferior de personas con sus publicaciones (un 25% menos).
Al despliegue del Rechazo en redes sociales se sumó la exposición continua que sus representantes contaron en los grandes medios de comunicación.
Periódicos impresos jugaron todas sus cartas por el Rechazo
Por su parte, el Grupo de Estudios de Medios de la Universidad Abierta de Recoleta publicó una serie de informes sobre la cobertura mediática del plebiscito constitucional, en los que revelaron que en los diarios impresos y televisión la tendencia hacia el Rechazo era evidente.
Para llevar a cabo su investigación, el grupo analizó las notas donde se mencionaban los temas de interés de veinte medios de relevancia nacional: El Mercurio, Latercera.com, La Tercera, Eldinamo.cl, Eldesconcierto.cl, Elmostrador.cl, Cnnchile.com, Emol.com, La Segunda, Cooperativa.cl, Theclinic.cl, Publimetro.cl, Canal 13, Biobiochile.cl, TVN, LaCuarta.com, Mega, Chilevisión, Las Últimas Noticias y Publimetro.
Al evaluar 1.653 notas aparecidas entre los días 1 y 15 de agosto de 2022, el análisis arrojó que La Tercera.com ha mantenido el liderazgo en la entrega de información sobre el plebiscito. E
«En este medio, tanto como en El Mercurio, La Tercera, Emol.com, Biobiochile.cl, Canal 13, La Segunda, LUN, Publimetro.cl, Eldinamo.cl, CHV y Mega, se puede observar una evidente tendencia de titulares pro-Rechazo», señalaron.
Desde el Grupo de Estudios de Medios de la U. Abierta de Recoleta advirtieron que los temas de fondo de la Constitución no estaban siendo debatidos en los medios.
«Resulta significativo que de 24 titulares relacionados con seguridad ciudadana y la propuesta de nueva Constitución, 17 están relacionados al Rechazo», explicaron en su tercer informe sobre la cobertura mediática del plebiscito.
En la investigación, también alertaron sobre la invisibilización de ciertos acontecimientos versus la alta exposición de otros: la presencia de actores de la farándula incluidos en la campaña del Rechazo destaca mucho más que temas como el evento denominado ‘Apruebazo’ en Puente Alto, con una participación multitudinaria, que solamente tuvo una mención, o el ‘Apruebazo’ en Maipú de la segunda quincena de julio, que solamente obtuvo tres menciones.
«Lo crucial del hito electoral hace que los periódicos impresos jueguen todas sus cartas por el Rechazo a pesar de hipotecar su credibilidad, lo cual queda de manifiesto en sus portadas» declararon en el informe.
‘Guerra digital’ contra la Convención Constitucional
Las grandes corporaciones mediáticas una vez más respondieron a los intereses de las élites nacionales como internacionales, lo que incluso fue condenado el pasado viernes 2 de septiembre por cinco congresistas de Estados Unidos, todos militantes del Partido Demócrata, quienes pidieron a los CEO de Meta (Mark Zuckerberg), Twitter (Parag Agrawal) y TikTok (Shou Zi Chew) «actuar con urgencia» para combatir la «campaña de desinformación» sobre la propuesta de nueva Constitución».
«Les escribimos para expresarles preocupaciones graves y urgentes sobre la desinformación que se comparte en sus redes sociales sobre la propuesta de Constitución chilena, que los chilenos votarán el 4 de septiembre del 2022», señalaron los congresistas en una declaración.
A medida que nos acercamos a un momento crucial del Gobierno chileno, les imploramos encarecidamente que actúen con urgencia para combatir las campañas corruptas de desinformación que socavan un proceso justo y democrático», agregaron.
Asimismo, apuntaron que en «el contexto de un proceso democrático tan importante y sensible, creemos que las corporaciones tecnológicas como las suyas tienen la obligación de asegurarse de que sus plataformas no sirvan para difundir el odio, mentiras y desinformación en el electorado».
A su vez, señalaron que Reuters informó que se está divulgando información inexacta sobre la propuesta de nueva Constitución de Chile. «Los expertos estiman que (la desinformación) viaja tres veces más rápido que la información precisa», añadieron.
«Periodistas chilenos han documentado minuciosamente lo que equivale a una ‘guerra digital’ contra la Convención Constitucional en un intento de deslegitimar y desacreditar la Constitución propuesta. Aún más preocupante, estos ataques a menudo utilizan discursos de odio dirigidos a mujeres y líderes indígenas de la Convención, como su primera presidenta, la académica mapuche Elisa Loncón», prosiguieron.
«Nos parece muy preocupante que las historias falsas virales y las mentiras se hayan correlacionado estrechamente con un cambio en las encuestas. Mientras tanto, a pesar de entender el poder de sus empresas para influir en los principales eventos políticos, estamos extremadamente preocupados de que sus corporaciones no estén tomando las medidas suficientes para combatir esta desinformación».
Pasividad del Consejo Nacional de Televisión
Ante los resultados del Plebiscito de Salida, cabe cuestionar la pasividad de las instituciones ante la agresiva campaña de desinformación y manipulación perpetrada a través de los medios.
«Ganó el rechazo por un inesperado (y amplio) margen y con justa razón: La inocente pasividad de las instituciones al no hacerse cargo de la mentira y manipulación de los medios apalancada por una costosa campaña de fake news y desinformación que lleva años», plantearon desde la cuenta en Twitter de Bot Check Chile.
Desde la Comisión Chilena de DDHH y un conjunto de organizaciones sociales manifestaron su «asombro» ante la pasividad del Consejo Nacional de Televisión, único regulador del Estado en la materia, ante la campaña de desprestigio y desinformación en contra del proceso constituyente, desestimando además las numerosas denuncias que se le habían presentado.
Asimismo, plantearon que el escaso y controversial protagonismo ejercido por Televisión Nacional de Chile resultaba «particularmente perjudicial en este sombrío panorama, por cuanto por su intermedio se encuentra directamente el compromiso del Estado con los estándares internacionales de libertad de expresión»
«Los efectos de este reprochable abandono de deberes por los actores involucrados, terminará siendo incidente en el resultado final del plebiscito», alertaron.