Tras la filtración de audios donde se menciona al vicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, en el Caso Odebrecht; las declaraciones del presidente ecuatoriano Lenín Moreno, que indicó que tomará medidas pero no se pronunciará porque el presidente no debe dar ‘dictámenes’; y el comunicado de Jorge Glas donde cuestiona las declaraciones de Moreno, el expresidente Rafael Correa se pronunció a través de la red social Twitter.
“Compatriotas, esta es la hoja de ruta para acallarnos: Su nuevo instrumento de persecución es la Contraloría. Ej: la nueva “auditoría” de la deuda YA auditada; el “informe” con responsabilidad penal por un pozo petrolero en la Amazonía, etc”, tuiteó ayer, tal como destaca El Universo.
“Con mayoría en la Asamblea, pueden también destituir al fiscal general, en caso de que no obedezca a sus pretensiones de enjuiciar penalmente a sus objetivos políticos. Su objetivo inmediato: destituir por cualquier medio al vicepresidente Jorge Glas, al mayor estorbo en sus ambiciones. El libreto es el de Brasil”, aseguró.
Además, hizo un llamado a sus seguidores para “impedir que regrese esta clase de ‘política’” y velar para que se realice lo más rápido posible un concurso para elegir a un nuevo contralor. Impulsó también a rechazar los “camisetazos en la Asamblea” y anunció una organización para la revocatoria del mandato de lo que él llama “asambleístas vendidos”, señala El Telégrafo.
En esa dirección, Correa amenazó con separarse de Alianza PAIS (AP) si el movimiento oficialista “calla” sobre un supuesto pacto entre la actual administración y la familia Bucaram -uno de los grupos más concentrados de la economía ecuatoriana-. A través de sus cuentas en redes sociales, Correa manifestó que “nadie puede estar contra el ‘diálogo’, incluso con la partidocracia; pero, no se engañen, lo que existe es un verdadero reparto de la Patria, como en el viejo país”.
El exmandatario basó su argumento en un supuesto “pacto” con la familia Bucaram, con el cual se ha permitido -según él- que miembros del Movimiento Fuerza Ecuador (FE) ahora laboren en la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL).
Según Correa, hay “pruebas” que confirman el acercamiento de funcionarios del Gobierno con la familia Bucaram. Ante esta situación, el exjefe de Estado afirmó que “esta corrupción institucionalizada no la puede aceptar AP. Si AP calla ante esto, es mejor que desaparezca, o, los que no toleramos el cinismo separarnos y hacer un nuevo movimiento”.