La conejita de Playboy Lindsey Pelas asegura que tiene que «sonreír pese al gran dolor que padece» cada vez que se toma alguna fotografía sexy para compartir en Instagram.
Para la modelo de 26 años sus senos naturales son más una maldición que una bendición.
En una entrevista con el tabloide británico The Sun, Pelas afirmó que sus enormes pechos pesan 11 kilos y le están causando un severo dolor de espalda.
La belleza californiana compartió el problema de salud que sufre con sus casi 7 millones de seguidores. Fueron muchos los usuarios que tuvieron amables palabras de apoyo.
«No puedo imaginar lo que debe ser para ti, mantente fuerte», escribió un fan. Otro comentó: «Cirugía de reducción mamaria. Yo todavía pienso que eres hermosa».
«Haciendo mi mejor cara dulce e inocente cuando estoy sufriendo», dijo en una de las publicaciones, en las que consiguió más de 90 mil likes.
Pelas no tiene pensado pasar por el quirófano y opta por masajes regulares y clases de yoga para ayudar a aliviar sus dolencias.
«Masajes y una cama nueva y agradable están ayudando a mantenerme libre de dolor».