Yo creo que cualquiera hubiese reaccionado así.
En caso que no lo sepas, MasterChef es una programa de competencia de cocina que se da en muchos países del mundo, desde Alemania hasta Brasil, México y Chile. En este último país, que por cierto es donde vivo, la competencia de la última y tercera temporada ha dado mucho que hablar debido a la gran frustración que sufren sus participantes.
Durante la última semana, los concursantes se sometieron al reto de la “caja misteriosa” que según indica Bio Bio Chile se trató de una instancia en la que, divididos en tríos, los participantes recibieron diferentes productos con los que debían cocinar un plato que sorprendiera al jurado. El problema vino cuando un equipo en particular, conformado por los participantes Jorge, Caio y Bundy tuvo varios conflictos durante la preparación del plato. A pesar de ello, el trío terminó venciendo y convirtiéndose en el grupo ganador, ante la atónita mirada de Vale, una concursante de otro equipo.
La chica, oriunda de Lolol, comuna ubicada en la provincia de Colchagua al sur del país, sintió que era un injusticia ya que el plato de su equipo estaba casi perfecto y su ejecución, a su parecer, había sido superior.
Fue allí que ante las reprimendas del productor Vale se quitó el delantal, lo tiró lejos y salió enojada del set, haciendo imposible que continuara la grabación del programa.
Cuando se le cuestionó su actuar ella explicó que se había sentido mal:
“Me dio rabia, porque sólo nos encontraron dos peros [dos cosas malas] en nuestros platos, y esa es mi molestia… Me dieron ganas de irme”.