El Tribunal de Distrito de Jerusalén rechazó la solicitud de la defensa de cancelar las acusaciones contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pero aceptó su petición de que las audiencias comiencen después de las próximas elecciones generales.
«Después de revisar y examinar los argumentos de las partes, llegamos a la conclusión general de que no había una razón clara para el rechazo de la acusación», escribieron los jueces en su fallo este lunes por la noche, según recogió la radio pública Kan.
Las audiencias contra el mandatario israelí tendrán lugar a partir del 5 de abril tres días a la semana, de lunes a miércoles de 9:00 a 15:30 hora local.
Netanyahu está acusado de fraude y abuso de confianza en tres casos, y soborno en uno de ellos, acusaciones que él niega.
El primer ministro calificó los cargos como «inventados y ridículos» y ha afirmado ser víctima de una caza de brujas.
Si bien el tribunal no vio motivo para cancelar las acusaciones, reprendió al fiscal general del Estado, Avichai Mandelblit, reconociendo un «defecto» en los procedimientos legales. La defensa había argumentado que la falta de aprobación formal por escrito de Mandelblit para la apertura de las investigaciones desacredita los casos contra el primer ministro.
Los jueces rechazaron la solicitud de Netanyahu de desestimar la acusación debido a la mala conducta del fiscal general en dos de los casos, denominados Caso 1000 y Caso 4000.
El caso 1000 alega que Netanyahu recibió regalos por un valor de más de 300.000 dólares del productor israelí-americano Arnon Milchan y del multimillonario australiano James Packer.
Mientras que el caso 2000 se refiere a supuestas conversaciones entre Netanyahu y el editor de la empresa de comunicaciones del grupo Yedioth Ahronoth, Arnon Mozes, para una cobertura periodística positiva de Netanyahu y su familia a cambio de que el mandatario debilitase al diario rival de Yedioth Ahronoth, Israel Hayom, propiedad del fallecido Sheldon Adelson.
El caso 4000 involucra un supuesto plan para suavizar las regulaciones para el magnate de las telecomunicaciones Shaul Elovitch a cambio de una cobertura positiva en su sitio web de noticias Walla. (Sputnik)