¿Quien era Prince Rogers Nelson?, indescifrable, extravagante, genio musical, defensor de sus derechos como artista frente a Warner, luego defensor de su imagen frente a Youtube. Reacio a las entrevistas, convertidas a veces en crípticas performances, Prince se enmarca en la historia de la música como un hombre de avanzada.
Hace unos años, el periodista Neil Strauss se enfrentó con el músico, y posteriormente lo contó en una breve escena en el libro Todos te quieren cuando estás muerto (Contra).
«Viajes al interior de la fama y la locura»
Por Neil Strauss
El problema de entrevistar a Prince es que no permite que los periodistas graben su voz, así que, o bien escribes muy rápido o bien tienes una memoria excelente que te permita captar el momento. En uno de nuestros encuentro, tocó algunas de sus nuevas canciones y luego dio un concierto privado en su casa de Los Ángeles. En otro, me habló durante cuarenta y cinco minutos sobre lo que significaba ser Testigo de Jehová. Pero mi encuentro más memorable fue el primero en una conferencia de prensa a la que asistí poco después de entrar a formar parte de la plantilla delNew York Times. Los guardias de seguridad comprobaron en la puerta que ningún periodista hubiera llevado su grabadora.
Periodista aleatorio: ¿Te preocupa que al lanzar el álbum exclusivamente en Internet acabe por perjudicar su entrada en las listas de éxitos?
Prince: Cuando me voy a llevar todas las ganancias, no me preocupa lo bien o mal que le vaya en las listas y no necesito un número uno. Soy número uno en el banco.
Periodista aleatorio: ¿Cuándo decidiste hacer esta gira?
Prince: Creo que cuando tenía siete años.
Si a los periodistas no se nos permite grabarte mientras hablas, ¿por qué hay cámaras de televisión en la sala?
Prince: Tú y yo podemos hablar de eso más tarde.
Doy por hecho que Prince solo está escaqueándose de la pregunta. Pero, en cuanto termina la conferencia de prensa, baja del estrado y viene derecho hacia mí. Entonces mueve el dedo indicándome que le siga.
Le sigo de cerca dejando atrás hileras de periodistas hasta llegar a una habitación trasera. Se apoya contra la pared y un guardaespaldas enorme coloca su brazo a la altura del pecho de Prince a modo de barrera, como si le preocupara que pueda acercarme demasiado a la diminuta estrella del pop.
Prince: ¿Por qué me has preguntado eso?
Porque no tiene sentido. Si la gente no puede grabar tu voz en una grabadora, ¿por qué puede grabarla en video?
Prince: Es una buena pregunta. No dejo que la gente grabe mis entrevistas porque a veces después publican grabaciones piratas.
¿No pueden hacer lo mismo con las cintas de video?
Prince: Sabemos la colocación de cada una de las cámaras, así que si lo hacen sabremos quién ha sido.
¿Y si publican un disco pirata solo con el audio?
Prince: (Silencio)
Guardaespaldas: Tienes que irte ya.
Mi teoría: el no ser grabado proporciona a Prince la posibilidad de negar en caso de que un periodista lo cite diciendo cualquier cosa que pueda crearle problemas. Sin embargo, durante la conferencia de prensa se mostró un poco más flexible porque quería cobertura en la televisión nacional.