“Lizzie fue capaz de darle vida a 5 personas y si ellas sobreviven y tienen hijos, ella va a haberle dado vida a muchas personas y eso es un pensamiento muy reconfortante para nosotros”.
Cuando Elizabeth Ford tenía 15 años a ella le diagnosticaron un asma severo. Durante los próximos 3 años la chica tuvo que ingresar constantemente al hospital. Lamentablemente ella no pudo luchar contra esta enfermedad y falleció a los 18 años.
Como el estado de salud de ella era complicado, Elizabeth siempre hablaba con sus padres acerca de sus últimos deseos. Una semana antes de morir, ella le dijo a sus papás que si ella se moría, quería que sus órganos se donaran. Gracias a su decisión, su corazón, riñones, bazo e hígado ayudaron a salvarle la vida a 5 personas, una de ellas un chico de 18 años que sufría de serios problemas al corazón.
“Lizzie fue capaz de darle vida a 5 personas y si ellas sobreviven y tienen hijos, ella va a haberle dado vida a muchas personas y eso es un pensamiento muy reconfortante para nosotros. Le dio a otros una segunda oportunidad. Sólo espero que esto inspire a más personas a donar sus órganos. Es humillante pensar que hay personas que no estarían vivas si no fuera por Lizzie”.
-David Ford, padre de Elizabeth-
A modo de reconocimiento de su decisión, Lizzie recibió un título póstumo sobre donación. Su padre aceptó este premio y agregó que ahora él ve los beneficios de la donación de órganos.
Su padre espera que su legado ayude a animar a más personas a que donen.
Fuente: Upsocl