Aumenta la tensión en torno a la polémica de los comedores populares en Argentina, pues en lugar de entregar los alimentos a los más necesitados, el gobierno liderado por Javier Milei, optó por almacenarlos en caso de alguna emergencia.
Sin embargo, las 5 mil toneladas de alimentos, fueron adquiridas durante la gestión del expresidente trasandino, Alberto Fernández. El problema, además de la tardanza en la entrega, radica en que mucha de la comida almacenada en los galpones está próxima a vencer.
La situación provocó que comedores y organizaciones sociales se manifestaran frente a uno de los galpones en cuestión.
«Es una cosa repugnante que haya millones de kilos de alimentos a unos metros y haya ollas populares vacías y gente que pasa hambre. Quieren provocar una situación de caos», expresó Juan Grabois, líder de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP).
Tras ello, el día de ayer la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, echó al Secretario de Niñez, Adolescencia y Familia, Pablo de la Torre, hombre responsable de los programas sobre seguridad alimentaria, y además, lo denunció ante la Oficina Anticorrupción.
Por ello, desde el Ministerio en cuestión, señalaron que, «se pone en marcha un protocolo para la entrega inmediata de los alimentos de próximo vencimiento por medio del Ejército Argentino para garantizar una logística rápida y eficiente«.
Según detalló Página 12, dentro de los miles de kilos almacenados, hay 339.867 kilos de leche en polvo próximas a vencer entre el 7 y 30 de julio. Además, hay 4439 kilos de harina de maíz que no pasan de agosto, mientras que hay arroz con hortalizas que ya vencieron en febrero pasado.