Tras la renuncia y formalización del exdirector general de la PDI, Sergio Muñoz, han surgido diversos cuestionamientos hacia la decisión del Presidente Gabriel Boric, de mantener en el cargo como general director de Carabineros a Ricardo Yáñez, quien en mayo próximo será formalizado por violaciones a los DD.HH durante el estallido social. Incluso, desde el oficialismo han solicitado la renuncia de Yáñez, lo cual aún no se ha concretado, mientras que el general director de la policía uniformada insistió en que seguirá liderando la institución hasta el último día.
Respecto a lo anterior, El Ciudadano conversó con Esteban Infante, abogado, director de la ONG Vivir sin Delincuencia y experto en defensa policial, quien criticó la permanencia de Yáñez en la dirección general, especialmente por «proteger» a La Manada de Carabineros, el club de fiestas sexuales de oficiales de la institución, quienes durante la pandemia realizaron celebraciones clandestinas con la intención de agredir sexualmente de funcionarias subalternas.
-El Presidente debió solicitar la renuncia de Yáñez por el caso La Manada de Carabineros. Debería el Presidente haberlo desvinculado de un principio por encubrir a los oficiales del caso Manada y otros más que siguieron apareciendo y los encubrió así como el caso del capitán Oportus por intento de violación de una periodista o del coronel Soto Troncoso, que con su prontuario siempre lo encubrieron-, comentó Infante, quien denunció la existencia de La Manada a Ricardo Yáñez, sin recibir respuesta.
Recordemos que actualmente la Fiscalía Oriente lleva a cabo una investigación por el caso La Manada de Carabineros, mientras el sumario administrativo cerró sin responsables, puesto que, solo trató las transferencias bancarias para ejecutar estas fiestas, y no los delitos de acoso, abuso sexual ni laboral.